¡Llegó la primera!
El Real Oviedo consiguió la primera victoria de la temporada en Córdoba, después de jugar un partido práctico. Los azules tuvieron efectividad máxima en un partido en el que Yoel Bárcenas deleitó a los aficionados carbayones. Anquela no planteó novedades en la alineación, repitiendo así el once de la primera jornada, que había conseguido dejar buenas sensaciones. No hubo, así pues, modificaciones en lo que a nombres se refiere, pero el conjunto azul sí que varió en algunos matices. El equipo estuvo más junto y buscó las contras como vía de escape.
Y en una de esas contras llegó el primer gol de Saúl. En una falta lateral a favor del Córdoba, el balón salió rechazado. El balance defensivo local fue malo y Saúl y Bárcenas salieron como balas tocando arrebato. El asturiano condujo hasta el centro del campo y ahí se la dio al panameño, que continuó restándole metros al césped hasta que se frenó para poner una décima de calma. La calma necesaria para que Saúl le superara por detrás libre de marca y servirle el balón para que Berjón batiera a Stefanovic.
El Oviedo aceptó el trato y el gol le hizo continuar igual. Relativamente cómodo, sin sufrir envites importantes por parte del Córdoba y lanzando el zarpazo cuando la ocasión lo permitía. Yoel Bárcenas era de los más activos. Ya participó en el primer tanto y lo probó también en el minuto 25, rematando con la zurda tras recortar hacia dentro. Fue un aviso.
En el minuto 33, Bárcenas no perdonó. Toché mandó el balón al desmarque entre los centrales y el esférico llegó tras un pequeño rebote al panameño, que no perdonó y batió en el uno contra uno a Stefanovic. Más colchón para los azules.
El Córdoba apretó en los minutos finales de la primera parte, con centros laterales y balones colgados desde el balón parado, pero no inquietó la portería de Alfonso Herrero, que se fue al descanso después de no haber sido apenas exigido, aunque los locales rondaban el área.
Pero tras el descanso, el Córdoba siguió apretando y ya comenzó incluso a llegar con peligro a la portería carbayona. Los locales salieron espoleados, ya con Sandoval en la grada y desde el arranque se volcaron. Jaime Romero hizo que Alfonso se empleara a fondo con una mano espectacular en el minuto 50, pero el guardameta no pudo hacer nada dos minutos después, cuando llegó el gol que recortaba ventajas. Javi Lara sacó un centro preciso desde la izquierda después de un córner, y Alfaro remató de cabeza libre de marca hacia las mallas.
El partido se complicaba, pero el Oviedo consiguió devolver el golpe rápido y frenar rápido los impulsos locales. Javi Muñoz probó desde la frontal antes de que llegara el segundo gol de Saúl Berjón. Después de un gran robo de Sergio Tejera, el balón llegó a Saúl en la frontal, que combinó con Bárcenas. El panameño nuevamente le puso calma al ataque y esperó la llegada de Diegui al área para servirle el esférico. El lateral sacó el centro raso a la zona de llegada de Berjón, que únicamente tuvo que empujar a placer.
El Oviedo no fue capaz de anestesiar el partido y el Córdoba, en un zarpazo volvió a meterse en el encuentro. En el minuto 73, Piovaccari ganó la batalla a Carlos Hernández en un balón a la espalda y consiguió batir a Alfonso con un disparo seco desde dentro del área.
Pero igual que sucedió anteriormente, el Oviedo asestó el golpe cuando más le dolió al Córdoba. En el minuto 81, viendo venir unos minutos finales complicados, nuevamente la contra y nuevamente Yoel Bárcenas para aniquilar el partido. El panameño salió desde su campo como un cohete y recibió el balón de Toché. Ninguno de los centrales pudo alcanzar a Bárcenas, que se plantó delante de Stefanovic y batió al guardameta.
En el descuento el Córdoba tuvo la ocasión perfecta para asustar al Oviedo. Un penalti cometido por Juan Forlín hizo que Álvaro Aguado se fuera a los once metros, pero emergió la figura de Alfonso Herrero, que rechazó la pena máxima. El partido murió y la primera victoria llegó para los azules, que mostraron una versión práctica necesaria en la categoría. Velocidad en las contras y efectividad máxima, con un Bárcenas estelar. En el debe queda ajustar en defensa, ya que se concedieron dos tantos en un partido que debió ser más tranquilo.
