La pizarra da sus frutos
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La Segunda división es una categoría en la que muchas veces los partidos se deciden por detalles mínimos. El balón parado puede ser una buena fuente de ocasiones a favor, y hacerse fuerte en ese aspecto garantiza puntos a lo largo del año. Es una faceta que el Oviedo de Anquela está mejorando y que está dando muchos goles en las últimas semanas.
Concretamente cinco de los últimos diez goles anotados por los azules en competición proceden de saques desde la esquina o de faltas colgadas al área, lo que deja también una gran media de un gol por partido a balón parado si se tienen en cuenta los cinco últimos encuentros.
En Lorca fue Rocha el que remató con una perfecta volea el servicio de Saúl, que suele ser el encargado de fabricar los remates de sus compañeros. Contra el Numancia también Saúl centró para Linares en la falta del 3-1 y anteriormente había sido Johannesson en un saque en corto desde la esquina el que telegrafió el pase a Carlos Hernández en el segundo palo.
En Tarragona también Carlos remató a gol un servicio de Aarón tras saque en corto de un córner, que ante el Lugo fue botado directamente por Saúl y rematado por Linares. Cinco goles que han dado puntos al equipo de Anquela y que muestras como la pizarra va dando sus frutos.