Quique: "Damos por bueno el empate ante un rival muy difícil"

Quique Sánchez Flores, entrenador del Espanyol, ha manifestado tras empatar (1-1) con el Éibar en el campo de Ipurúa que da "por bueno el empate ante un rival muy difícil".

El resultado fue reflejo de un encuentro muy igualado de la jornada 28 de Primera División, en la que los guipuzcoanos (41 puntos) siguen por delante en la clasificación de los 'periquitos' (40 puntos), con el 'gol-average' particular nivelado por el 3-3 de la primera vuelta en feudo blanquiazul.
"Empatar en Ipurúa ante el Éibar es complicado, damos por bueno el empate", ha destacado Quique Sánchez Flores.
"Ha sido un partido complejo, muy difícil. El Éibar te asfixia sin balón, te reduce los espacios, es muy complicado", ha insistido el preparador del conjunto de Barcelona.
Los eibarreses se adelantaron en el marcador en la primera parte, pero tras el descanso lograron las tablas los blanquiazules, que hoy han jugado de rojiblanco.
"El partido ha sido parecido a lo que queríamos, preferíamos defender balones centrales que laterales (en referencia a que deseaba que el Eibar no centrara desde las bandas, donde crea más peligro).
Sólo ha puesto un pero en el quehacer de sus hombres. "Nos lamentamos de que las 4 ocasiones más claras no tiramos a puerta. Tiramos poco, pero en las 4 ocasiones más claras, ni siquiera acabaron en disparo. En 4 contras en superioridad ni tiramos a puerta", se ha lamentado.
El duelo ha sido muy intenso, con una gran lucha en el centro del campo con dos contendientes que intentaban anularse.
"Es complicado, porque ellos lo ponen complejo, acuden rápido donde está la pelota en segunda jugada. Hemos estado bien porque un compañero ha 'despertado' a otro. Ellos intercambiaban posiciones, pero es bueno que nuestros jugadores han hablado unos con otros en el césped", ha valorado.
El Espanyol acabó el partido con 10 futbolistas, porque en el tiempo de descuento (m. 94) tuvo que retirarse lesionado (fue sacado en camilla) Oscar Duarte, quien se dolió de la rodilla izquierda.
"No queremos alarmar a nadie, tras hacerle el médico el primer reconocimiento parece que no es grave, parece que no hay inestabilidad en la rodilla", ha explicado el técnico.