Tocar madera no es sinónimo de suerte para Messi
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Tocar madera es una de las supersticiones más recurridas para apelar a la suerte. No obstante las manías acaban quedándose en eso y sino que se lo digan a Messi. El astro argentino no guardará gratos recuerdo del citado leño, que tanto le ha privado de engordar sus registros deportivos.
Corría pasada la media hora de partido cuando Messi disparó desde el balcón del área, pero su disparo se estrelló con la cruceta por enésima vez. Poco después, un tiro más que acabó, sin embargo, en gol cuando Paulinho la empujó a la red. En la segunda parte llegó un nuevo disparo, antes de incluso fallar un penalti que detuvo Rubén.
Y es que el internacional de la albiceleste se ha topado con el palo hasta en catorce ocasiones en este curso, negándole unos números que bien serían estelares sin la aparición de la madera.
Tras él aparece Gerard Piqué, que acumula hasta tres disparos repelidos. Un bagaje que se suma a los 25 palos totales en los que se ha estancado el Barça esta temporada.
