Hleb no se medirá a su ex equipo

El exbarcelonista Alexandr Hleb, que milita en el BATE Borísov, se ha caído en el último momento de la lista del partido de Liga de Campeones de mañana, martes, ante el Barcelona, ha asegurado el técnico del equipo bielorruso, Alexandr Yermakovich.

Hleb, que regresó recientemente al club tras un año en el fútbol turco, no podrá enfrentarse al equipo catalán, en el que militó una temporada (2008-09) y donde no rindió al mismo nivel que en el Arsenal de Londres o el Sttutgart.
Yermakovich, quien también confirmó la baja del delantero Rodiónov y de los defensas Zhavnerchik y Dubra, reconoció que el BATE "tiene pocas opciones en ataque".
Los únicos delanteros puros en buenas condiciones son Signévich y Jevtic, mientras Mozolevski regresó la pasada semana a la disciplina del equipo tras dos años en el dique seco por lesión e incluso marcó el viernes el gol en el partido que le dio el décimo título consecutivo de liga al BATE.
"El partido ante el Barcelona será una fiesta para nosotros. No tenemos miedo, sólo respeto por nuestro rival. Hubiéramos preferido que Messi jugara. Hubiera sido divertido ver a esa leyenda en el campo", señaló Yermakovich.
El técnico reconoció la importancia de la ausencia de dos "extraordinarios jugadores" como Messi e Iniesta, pero "todo el equipo consiste en jugadores del máximo nivel", así que, "de todas formas, afrontamos una tarea difícil".
Reconoció que hace cuatro temporadas, cuando también coincidieron con el equipo español en la fase de grupos, "sobrecargaron" a los jugadores con demasiadas explicaciones tácticas, lo que no evitó que el BATE "sufriera dos abultadas derrotas".
"Dada la experiencia negativa, esta vez decidimos reducir a la mínima expresión los preparativos tácticos. El partido decidirá nuestro futuro. Toda la plantilla está excitada. Probablemente toda Bielorrusia lo está. La responsabilidad es grande, pero tenemos que jugar bien", dijo.
A diferencia de hace cuatro temporadas, ahora el BATE disputa sus partidos europeos no en Minsk, sino en su propio estadio, el Borísov Arena, un pequeño pero moderno estadio inaugurado en 2014.