Williams marca al Athletic el camino de Europa

Enterrada la copa la tarde del sábado pedía ver a un Athletic Club que utilizara un trampolín habitual, como el del Coliseum de Getafe, para impulsar sus aspiraciones europeas.

Así lo entendía la afición, que se dejó notar en gran número en la grada, plantilla del Gernika incluída, empujando a los leones a una victoria por (0-1) tan corta como jugosa. Los bilbaínos fueron irregulares. Tuvieron ocasiones de escándalo en la primera mitad, pero en la segunda la falta de frescura hizo temer por el empate.
Lo mismo que el colegiado, que permitió mucha cera y escamoteó un claro penalti sobre Aduriz. Sea como fuere, ya se cuenta con 34 puntos, y tan solo se ha de lamentar que De Marcos será baja ante el Villarreal al ver su quinta amarilla.
Ernesto Valverde, tras el palizón físico que supuso hacer tambalearse al Barça en el mismísimo Camp Nou, quiso refrescar el equipo con la entrada de Iraizoz, De Marcos, Etxeita, Gurpegui y Sabin Merino. Laporte, una de las estrellas del conjunto bilbaíno, se quedaba en el banquillo ya que arrastraba alguna pequeña molestia.
Perdonar más que Ghandi
El primer buen remate de la tarde fue obra de Mikel San José, también se pidió un penalti de Cala a Aduriz, aunque es justo decir que fueron los azulones quienes empezaron más puestos, tal vez ayudados por el golpe recibido por Aritz que le hizo andar kilikolo un rato. Lo cierto es que parecieron con ganas de explorar el espacio a la espalda de Óscar De Marcos a través de Roberto Lago, pero fue más bien un postureo.
Fue aguantar el tirón y ya hacerse con el mando en apenas 10 minutos merced al aumento de la presión y el ritmo. Fue decirlo y hacerlo... ¡pero hombre luego hay que acertar! Por ejemplo Merino tuvo dos ocasiones de escándalo que malogró. Primero Williams se la puso y Guaita tuvo que volar para evitar que el de Urduliz abriera el marcador. Más clara aún fue la segunda, de esas de empujar, pero incomprensiblemente a Sabin se le fue arriba otro servicio de Iñaki cuando ya se tiraba hasta el cohete de celebración en Basurto.
Un gol y cuatro 'uyys'...
La duda era si tanto perdonar luego no iba a suponer derramar alguna lágrima, porque Aduriz también fallaba un botepronto de zurda (asequible para él) que hizo rogar explicaciones al cielo. Pero Williams está de dulce, y aparte de anunciar vendetta al video de Muniain, supo firmar, tras un gran pase de Balenziaga, el 0-1 de cabeza en el que ya es su séptimo gol en esta liga. Un tanto que hacía mínima justicia a lo visto en esos primeros 25 minutos. Bueno, tal vez ni eso, porque alguna de las otras cuatro nítidas balas erradas ya podía haber entrado también.Tercera victoria consecutiva en el Coliseum
No lo hicieron, e incluso dio la sensación de que el equipo vasco reservó fuerzas en el rush final del primer tiempo, lapso en el que los de Fran Escrivá volvieron a sentirse sueltos, sin crear peligro, hasta que Estrada Fernández apuntó el camino de la caseta. Sin cambios en la reanudación el Athletic retomó sus operaciones con disparos de Sabin y Beñat, o el lanzamiento de córners que buscaban decapitar las aspiraciones madrileñas. Lo que pasa es que parecía haber bajado el gas.
El cansancio hace mella
Para evitarlo Valverde metió a Iñigo Lekue por un cansado Williams, pero en primera instancia el que pudo marcar fue Scepovic, quien solo pudo ser frenado in extremis por la sangre fría de Gorka Iraizoz. Un peligroso aviso ya que la distancia era mínima y parecía que el cansancio de Barcelona empezaba a pesar. Si a eso le sumas que Escrivá metía delanteros Laporte tuvo que vestirse de corto para darle empaque a un conjunto al que se le hacía largo el segundo tiempo.
El balón quemaba y el temor a perder tres puntos tan ricos se dejaba sentir. El recién salido Alvaro Vázquez probó fortuna, y eso terminó de convencer al Txingurri de que había que alejar la pelota del área dando salida a Viguera. Borja pudo cerrar el partido pero se embolicó solo queriendo reivindicarse malogrando una ocasión clara, como lo hubiera sido un claro penalti sobre Aduriz que Estrada no vio. Y ya van...
Tuvo el Getafe en el descuento en Alvaro la última de la tarde, pero afortunadamente se compensó lo del primer tiempo, mientras encima veía como Cala fue expulsado por una tangana con Gurpegui. Los lógicos nervios de un 0-1. Ahí acabó todo.
Por fin una semana placentera 
Después de un enero infernal, la eliminación copera va a permitir al menos que Valverde pueda dar un poco de tregua a sus chicos. Esta semana tendrán tres días libres, ya que el único compromiso será el del sábado en San Mamés ante el Villarreal de Marcelino. Luego, pues habrá que ir al Bernabéu, a ver qué toca esta vez.

@asismartin