Hay que seguir mejorando

Después de perder la imbatibilidad en el estadio de Gran Canaria al Athletic Club se le presentaba este miércoles en San Mamés el primer verdadero 'gallo' de la temporada, nada menos que un Atlético de Madrid que ha logrado dos subcampeonatos de Champions en los últimos cuatro años.

Una piedra de toque, y una piedra en realidad en el zapato que sigue doliendo tras el (1-2) de esta noche en el que Griezmann ha vuelto a ser un demonio rubio pese a no marcar. Lo hicieron Correa, Carrasco y Raúl García, que acortaba distancias en el descuento y rompía la sequía de dos choques sin mojar de los leones.
Había dicho el Cuco Ziganda, quien tiraba de un once 'híbrido' con cinco cambios respecto a Canarias pero mayoría de titulares, eso sí, sin Iñaki Williams ni Beñat, este ya 'reservado' por tercer partido consecutivo... según el técnico sin el menor contratiempo físico ¿?, que "este partido nos dirá dónde estamos".
Está claro que un peldaño o algunos más por debajo de ellos seguro, pero hay que quedarse con el empuje del equipo en el primer tiempo, en el que si hubiera anotado el penalti que Oblak paraba a Aduriz, después de 13 aciertos consecutivos del donostiarra, probablemente hubiera dado más guerra.

Ziganda “El primer tiempo ha estado bastante bien, en la línea de lo que queremos. Nos ha afectado demasiado el error en el penalti” 
Pero en la segunda parte, pasó factura anímica ese fallo y tal vez el exceso de confianza de Unai Núñez previo al tiro al poste; los madrileños tomaron ya el control 'como les gusta a ellos', con el marcador en ventaja, e hicieron sangre con sus contras pese a las grandes paradas de Kepa Arrizabalaga, que dio un recital en algunos momentos de intenso ataque colchonero.
Todavía queda rematar la semana este sábado con la visita al tocado Málaga de Míchel, que tendrá lugar a partir de las 18:30 en La Rosaleda, con el arbitraje del madrileño Del Cerro Grande.