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Athletic Club: Lo que el tiempo se llevó

Athletic Club: Lo que el tiempo se llevó

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Agustín Presmanes
Escribe en ElDesmarque Agustín Presmanes.
Escribe en ElDesmarque Agustín Presmanes.

No es fácil agarrarse a razones de peso que nos permitan entender, que nos ayuden a asumir que los tiempos cambian. También en y para el Athletic Club de Bilbao.

No es fácil ver cómo lo que nació como un juego para medir fuerzas entre los pueblos, las ciudades o las escuelas, lo han convertido en un negocio puro y duro, en el que lo único que vale es que haya muchos movimientos en clave de traspasos millonarios.

No es fácil asumir que lo sueños de los niños de ahora ya no son como los de antes. El rojo y el blanco se difuminan, empañados por cuentos de la lechera que anidan en la cabeza de los niños y sus padres.

Un Josu Urrutia, presidente del Athletic, en estado pensativo
Un Josu Urrutia, presidente del Athletic, en estado pensativo

Ha ganado la batalla el equipo del negocio fácil, del movimiento constante, del olvido de las raíces, de la ambición por ganar sin límites, del no valorar los pequeños detalles.

Es difícil transmitir a los que ahora están empezando a empaparse del mundo Athletic Club cuál es la base que sustenta nuestra forma de ser, porque la están destrozando en pedazos.

Es prácticamente imposible entender cómo una persona de aquí, criada aquí, educada aquí, que lo tenía todo para ser punta de lanza de un proyecto de nuevo ambicioso, elige irse, elige escoger al mejor postor y, de un portazo, revuelve todos los papeles de nuestra filosofía.

Quizá otras salidas fueron más esperadas o hicieron más daño en lo deportivo, pero esta última, la de Kepa Arrizabalaga, ha movido nuestros cimientos.

San Mamés convertido en futbolín para un torneo interbares.
San Mamés convertido en futbolín para un torneo interbares.

Es tiempo de parar, de reflexionar, de analizar el porqué de las cosas.

Ya podemos decir que las salidas de jugadores importantes se han convertido en algo habitual en el Athletic.

Necesitamos conocer en profundidad las razones, no quedarnos en la superficie del cuento simplificado de que se van para vivir una vida mejor.

Necesitamos saber en qué momento de las vidas de estos chavales empiezan a trinar los cantos de jilgueros.

Necesitamos saber si es consecuencia de un nuevo modelo de vida o de un modelo de club desfasado.

Necesitamos saber cuál es el papel de sus padres en todo esto, qué buscan cuando ingresan en Lezama, cuál es su compromiso con el club, si tienen hambre de gabarra o simplemente buscan un trampolín para saltar a planetas más lustrosos.

Necesitamos exigir compromiso, construir un proyecto desde el inicio, inculcar a todos los jugadores de Lezama que es absolutamente necesario devolver la gabarra a la ría.

La camiseta de Kepa cuando estaba instalada en el campo de San Mamés
La camiseta de Kepa cuando estaba instalada en el campo de San Mamés

Necesitamos volver a hacer de nuestra filosofía fortaleza, nunca debilidad.

Desterrar excusas, buscar razones, recuperar ambiciones.

Necesitamos unidad, que no haya frentes ni enfrentamientos abiertos, más allá del necesario debate constructivo.

Necesitamos no reinventar Lezama cada cuatro años, seguir un modelo continuo y contar con profesionales que sean capaces de transmitir técnica y corazón.

Recuperar pasajes de la historia, de boca de nuestras leyendas, para que los chicos conozcan las grandes gestas del club, tan lejanas ya.

Que les cuenten quién era Pichichi, Bata, aquella historia del 12-1, cómo se gana una copa con todo en contra ante el mejor equipo del mundo, cómo se gana una liga en la última jornada cuando ya nadie apuesta por ti.

Que les cuenten que ante semejantes gestas el pueblo se echa a la calle, que el pueblo sufre con las derrotas y anhela las victorias, que forman parte de nosotros y que todos queremos más.

Me temo que este último vuelo de Lezama nos obliga a mirar hacia dentro, hacer una crítica sincera y modelar un plan que permita cambiar esta tendencia y siente las bases, sólidas, de un futuro que tiene que ser ambicioso.

Por Agustín Presmanes Losada, Ingeniero de caminos 

@AgusPresmanes

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  1. Juanma

    Solo hay una forma de afrontar el tema y es aumentar a 150 millones la cláusula de los jugadores.

  2. Imanol

    Totalmente de acuerdo con Iaki#2

  3. Edu

    Soy del Athletic desde pequeo, no soy vasco. Los tiempos cambian, la filosofa tambin. La base debera ser la cantera, formada en Lezama con independencia del lugar de nacimiento. Eso con un par o tres de jugadores de la lite mundial, hara al Athletic grande sin perder su esencia en estos tiempos globales. Aupa Athletic

  4. Iñaki

    Estimado Agustín: Busca una utopía, esa propuesta acaba en fracaso seguro... El mundo sigue y no hay marcha atrás... no se puede quitar la globalizacion ni Internet... Se nos van a ir la gran mayoría de los buenos jugadores que tengan ofertas... lo de Oyarzabal con la Real ha sido una excepción. Y yo no quiero más Julen Guerreros, renovaciones millonarias a 10 años para mantener jugadores. Yo apuesto por que jueguen todos los hijos de vascos (y llegado el caso hasta nietos) y cualquier chaval formado en Euskadi (¿puede el chaval que vino ad hoc a Navarra con 17 años y no puede asensio?.. ¿Estamos locos?). ¿Laporte entró en la filosofía y los niños riojanos no? ¿Mi sobrino si nace en Madrid no puede jugar? Insisto: ¿por qué nos engañamos continuamente? Niños de Zonas limítrofes o cualquiera que venga joven también entran para mí. Tienen que tener competencia los jugadores o nos tendrán trincados gente mediocre con contratos millonarios. Por otra parte hay que mantener un esquema deportivo a largo plazo, y no cambiar cada elección de responsables. Hay que fichar a los mejores técnicos, masajistas, preparadores físicos y entrenadores de críos del mundo. Y ojeadores, los mejores. Y fuera todos los enchufados y estómagos agradecidos. Hay que cambiar los estatutos, fuera socios compromisarios. Hay que recoger sugerencias y mejoras de socios. Y hay que tener un gestor excepcional, que no sea el presidente el que decida todo. ¿O somos el Madrid? ¿Y acaso Urrutia es Florentino? Etc, etc, etc... Los socios desde mi punto de vista tenemos que tener este debate y el del artículo (no digo que lo que propongo sea lo mejor), y decidir qué Athetic queremos en los próximos 25 años (no miraría más lejos a la velocidad que cambia hoy todo).

  5. UNAI

    No entiendo este artículo. Pretende ser épico explicando algo tan sencillo como que el tiempo pasa y todo cambia. Aún así el Athletic es y será siempre especial y nada ni nadie cambiara eso.

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