El año del Athletic, el año de la Champions

No son moco de pavo 16 años. Es toda una adolescencia en la vida de una persona. Y 16 años han sido los que ha tenido que esperar el Athletic Club para regresar a la máxima competición de clubes, la Champions League. Un logro que marca por completo el año que se nos va, fraguado además con un buen fútbol y con el plus de ocupar la cuarta plaza desde diciembre, tras vencer al FC Barcelona de Leo Messi, hasta el final del campeonato de Liga. 70 puntos de la mano del retornado a Bilbao Ernesto Valverde, que ha calificado el año de "maravilloso", y con una brillante traca final.

Fue un 2 mayo concretamente, donde Madrid volvió a ver un 'fusilamiento'. Fue el del Rayo Vallecano. Ya que con un 0-3 el Athletic certificaba en Vallecas esa cuarta plaza y el billete para la previa de la Champions en la que acabaría derrotando a un cabeza de serie que partía como favorito: el Napoli de Rafa Benítez, empatando en Italia y fundiendo a los transalpinos con un 3-1 en San Mamés.
Pero, ay amigo, esa brillante trayectoria de los leones trajo, exhibido en el escaparate del fútbol audiovisual de hoy, sus alegrías y sus penas. A Ander Iturraspe casi le da el pasaporte para el Mundial de Brasil, por ejemplo. Aunque visto el papel de los de Vicente del Bosque casi fue mejor no ir y veranear. Pero lo que de verdad dolió en Bizkaia fue la marcha del otro Ander, Herrera.
El ex zaragocista agarró el avión a Manchester poco antes de la previa pese a que su agente acababa de decir en prensa que "Ander tan solo piensa en la eliminatoria del Nápoles". Un palo doloroso, pese a los 36 kilos para la caja, ya que el Athletic prefiere tener el dinero en el césped que en el banco. Sin olvidar, como dijo el presidente, Josu Urrutia, que para una entidad de fuerte raigambre filosófica la "actitud de Ander ha sido una decepción".
Su proceder contrastó con el de otros ex compañeros suyos, que sí han estirado sus contratos en Ibaigane. Como Iker Muniain, Mikel San José, que debutó como internacional, o, sobre todo, Aymeric Laporte. El galo de Agen, seguido por todos los colosos de Europa, tuvo a bien no sólo renovar hasta 2018, sino incluso subirse la cláusula a 42 millones de euros. Esos son los gestos que se esperan en un Club tan especial, diferente, distinto a todos, que mima a sus cachorros como nadie.
Ahí quedan, como ejemplo, los prometedores debuts de varios futbolistas salidos de Lezama que deberán ser grandes realidades en Primera División en poco tiempo. En este 2014 tan productivo hemos visto echar los dientes a Unai López en la previa continental, a Ager Aketxe en la fase de grupos de la UEFA CL, a Bustinza en Almería o al diamante negro, Iñaki Williams, el killer del Bilbao Athletic, que se pegó sus buenas carreras en La Catedral ante el Córdoba. Vaya, ese fue un mal día para dejar de fumar, ahora que no se va a poder hacerlo en los estadios. El colista se llevó los puntos de Bilbao. pero hasta eso es tradición en el club rey de las tradiciones. El mismo que se lleva el mítico arco de La Catedral a Lezama para estar junto a la tribuna Piru Gaínza o el busto de Zarra.
Y San Mamés. Decir Athletic Club es decir San Mamés. El viejo, el nuevo, el de siempre. Hay cosas que no cambian pese a la arquitectura. El espíritu sigue inmutable, un alma que se dejará sentir en la Eurocopa de 2020, para la que el nuevo campo, que estará concluído en la primavera de 2015, ha sido elegido como sede. San Mamés sólo hay uno. Lo mismo que Jose Iragorri, la voz del bacalao, que nos dejaba en mayo. La sala de prensa del nuevo campo lleva para siempre el recuerdo del periodista que consiguió ser visto por los athleticzales como un futbolista más. Alguien que compartió micrófonos radiofónicos con otro gran comunicador zurigorri que nos dejó en diciembre, Jon Larrea.
El recuerdo de Hoss y Jonla es inmejorable, como lo debe ser en general este 2014, que pese al dudoso arranque del nuevo curso, la fuga de Herrera o la temprana eliminación vía Borisov (que da paso ahora a disputar la Europa League), no pueden hacernos olvidar que el Athletic volvió a estar entre los mejores. En la Champions League, jugando sólo con vascos o futbolistas hechos en Euskadi 16 años después. No cambies nunca Athletic. Beti zurekin!
Zorionak ta Urte berri on!