Dominion no domina

   Mala racha la que está pasando el Dominion Bilbao Basket. Varios partidos perdidos a domicilio y alguna derrota en casa. A priori no se aprecian mayores problemas ni hay una crisis de juego que pueda dar respuesta a este pequeño bache. No es justo ni siquiera hacer balance tras el último partido contra todo un Real Madrid jugando en su pabellón, pero si se vieron ciertos detalles por los que la victoria era cosa imposible.

     De inicio sin Marko Todorovic en cancha, y con Ethan Wragee supliendo al lesionado Axel Hervelle, el juego que el equipo podía presentar se presentía con tanto tirador en cancha. Solo el fajador Latavious Williams como encargado del trabajo sucio. Los primeros ataques son demasiados tiros desde la línea de 6,75m que con solo Williams como reboteador ofensivo contra las torres blancas, se antojaba un gran riesgo. Tiro fallado suponía rebote defensivo del Madrid y canasta al contragolpe sin que diera tiempo a colocarse la defensa.  El baloncesto es un deporte cruel donde las diferencias pueden ser escandalosas cuando tú fallas y el contrario mete (dos que no meto y dos que me meten). La distancia en el marcador va aumentado sin que uno pueda hacer nada para parar las canastas rápidas y en superioridad numérica. Y la precipitación por querer acortar hace que uno caiga en el error de querer sumar más rápido de tres en tres, y se repite el fallo. En otras palabras uno quiere salvarse usando lo mismo que te está matando.      Parece sencillo. Ellos permiten mas el tiro exterior y si fallas te anotan con facilidad.   Para ilustrar con números esta apreciación, decir que de los 10 primeros ataques del Bilbao Basket, 7 son intentos de tres puntos, y que si la memoria no me falla, solo se anota un triple y una canasta de 2 para un total de 5 puntos.   Solo tras la salida en la dirección de Raúl López hacía pensar que la cosa iba a cambiar y que la lectura del juego y la serenidad iban a aparecer. También sale Marko y por tanto el patrón de juego y las opciones de anotar pueden empezar a darse desde el poste bajo. Alguna jugada interesante, pero el Madrid estaba ya crecido. El Bilbao Basket seguía intentando disminuir la ventaja desde la larga distancia. Total de la primera parte 17 triples intentados para solo 3 aciertos. Un sonrojante 52-24 en el marcador y 28 puntos de diferencia. El Real Madrid con 26 rebotes en su haber, la mayoria defensivos que propiciaron muchos puntos al contrataque gracias a muchas de las 9 asistencias, en esa primera mitad.  La segunda parte la linea de tres volvió a ser nuestro verdugo con 1/15. Al final del partido una inusual estadística de 4 de 32 en triples que cuesta digerir. Lo que está claro es que el equilibrio entre juego interior y exterior no fue el adecuado como lo corroboran los números donde casi se hicieron los mismo tiros de dos que de tres 38 frente a 32 tiros de 2. El Madrid por el contrario fue mas comedido en ese aspecto y su relación en el tiro fue de 39 frente a 20. Un desequilibrio en la selección de tiro como la del domingo frente a un Real Madrid que no te va a perdonar el fallo, es un suicidio, si no estás acertado ese día. El Dominion no supo dominar el ritmo de partido, ni sus ansias con una mejor selección de tiro  Pero lo que está claro es que el equipo sigue siendo el mismo. Los mismo buenos jugadores y una gran dirección desde la banda, que a buen seguro sabrán retomar el rumbo de la victoria para entrar en buena dinámica en los playoffs.
 
@slotenbilbao