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Jonathan Lastra: "Mi sueño es ser campeón del mundo"

Jonathan Lastra: "Mi sueño es ser campeón del mundo"

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Luke Maguire

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Se habla de la crisis del ciclismo, de la cercana desaparición de grandes figuras nacionales en este deporte… Pero en el último año un nuevo nombre ha comenzado a sonar y parece querer romper con esa idea. Con 23 años el joven de la eterna sonrisa, Jonathan Lastra, podría ser el próximo embajador que el ciclismo añora.

Curtido en el mundo del ciclocross, la pasada temporada hizo su debut en categoría profesional, logrando subir al podio en dos ocasiones. Una en la Ride London Classic y otra en la primera etapa de la Vuelta al País Vasco. Tras un breve entrenamiento en su rutina de pretemporada, dedica unos minutos a ElDesmarque Bizkaia para hablar sobre cómo se sintió en aquel debut, por qué decidió dar el salto a la carretera y sus aspiraciones para la próxima temporada vestido por segundo año consecutivo con el maillot de Caja Rural.
¿Cuál es la cosa más importante que has aprendido en tu primer año como profesional?
La verdad es que aprendes mucho. La primera carrera fue un poco para olvidar. Es el sueño de tu vida, pero en mi caso me puse enfermo justo antes. Apenas pude comer los dos días antes… Salí y ya sabía que no iba a terminarla. No era la mejor experiencia pero igual estoy más fuerte por el hecho de haber vivido eso.
¿Ha sido una gran diferencia de nivel el salto entre amateur y profesional?
En amateur se corre mucho a golpes. No hay un equipo que controla las carreras y resulta que hay muchos ataques y son muy explosivos. Al final en las carreras pro hay muchos más kilómetros y carreras más largas. El ritmo sí que lo diferencia, pero en amateur no hay que aguantar ese ritmo durante tanto tiempo. Las salidas en categoría profesional son fuertes, pero diría que casi también como las de amateur.
¿Y entre el nivel Continental y Pro Continental/WorldTour?
Va todo por escalones. Es el ritmo lo que lo diferencia. Una carrera continental tiene un ritmo como un amateur, pro continental sin embargo mayor ritmo y de ahí al World Tour hay otro salto. En World Tour se nota que ya desde la salida, si se pone duro el tema tienen un puntito más, es verdad que se corre diferente.
¿Tu primera relación con el ciclismo vino por ciclocross… Cómo fue el paso a carretera?
Desde siempre me he centrado en ciclocross. Yo sentía que en el futuro me iba a preguntar como hubiera sido probar carretera. Porque claro, ciclocross te puede salir muy bien, puedes estar contento pero quizás te hubieses preguntado toda la vida si hubieses sido profesional. Entonces pensé… "vamos a probar carretera a ver qué sale". Pero claro, si hacía carretera iban a ser dos años para pasar a profesionales. Y si no hubiera pasado… hubiera vuelto a ciclocross. Tuve la suerte de que en Caja Rural les interesé. A pesar de que el primer año salió mal porque tuve un par de lesiones cuando empecé a ganar.
Y tu corazón queda con el ciclocross…
Sí, la verdad que sí. Pero cada vez menos… ya son tres años que no hago ciclocross. El calendario para carretera no es muy acorde con ello.
¿Y las técnicas del ciclocross te ayudan en la carretera?
Sí que ayuda porque son cosas diferentes. No es lo mismo la velocidad, ya que en carretera en un puerto (que no esté mojado) es mucha la velocidad que se alcanza. En esto igual no te ayuda porque es más lento. Pero por ejemplo yo he hecho bajadas este año en las que puedo decir que el hecho de haberlas conocido y la técnica del ciclocross me han ayudado a hacerlas mejor.
Muchos ciclistas en su primer año pro se quedan en la parte trasera del pelotón pero tú has estado en todas las fugas de las carreras. ¿Es esta tu forma de correr?
El primer año me lo tome así. Cómo aprender, ir poco a poco… pero al final el equipo es un equipo de fugas y a mí me gusta. No se puede hacer todos los días, pero yo recuerdo que desde el primer día yo intentaba meterme en las fugas. Sabía que era lo que podía hacer. Buscar la fuga y hacerlo así durante todo el año. Había veces en que me encontraba en la fuga y me decía a mi mismo "pero qué hago aquí, si no la quería coger hoy…".
Por las fugas has logrado tus mejores resultados…
Sí, en el Ride London Classic por ejemplo. Gané el premio de metas volantes y pude subir al podio con Tom Boonen. Ese día no buscaba la fuga, pero supe verla y una vez que estás dentro pues hay que disfrutar.
Sacaste tu mejor resultado en la Vuelta al País Vasco… ¿Cómo te sentiste subiendo al podio en casa?
En ese momento lo disfrutas, pero quieres más. En el momento ni te das cuenta. Lo vives, pero ya estás pensando vamos a hacerlo mañana también. Por lo menos intentarlo. Me sorprendió incluso que al día siguiente hasta mitad de etapa iba muy bien.
¿Sabías llegando a la meta que tendrías el maillot?
Sí. Me sentía muy feliz. Los dos primeros pasos de montaña no puntué y el siguiente, cuando ya había cogido un poquito de aire e íbamos más tranquilos en carrera es cuando empecé a puntuar. En ese momento mi director me dijo "tienes el maillot por un punto. Lo tienes." Y aun así todavía podía perderlo. Iba todo el rato detrás del coche del equipo, porque no podía casi ni subir el puerto, iba haciendo eses. Iba preguntando todo el rato "¿lo tengo?". Estaba nervioso por pensar que quizás me lo podían quitar.   ¿Dentro de pelotón tienes algún ídolo?
Dentro del pelotón los que más me gustan son Peter Sagan y Zdeněk Štybar.
¿Mirando un poco al futuro, la temporada que viene cuáles son tus objetivos?
Voy a empezar en Argentina en enero, en la Vuelta San Juan. Son seis días y la verdad que me gusta la idea de empezar tan temprano porque a pesar de que sufriremos el calor, saldremos más en forma. Por otro lado, en la Vuelta a País Vasco me gustaría hacerlo bien. Seguir dando guerra e intentar poder correr mi primera Vuelta a España. Yo lo que tengo que hacer es mejorar, eso es lo principal.
¿Piensas que tu punto fuerte está en saber buscar y encontrar las fugas?
Yo pienso que sí. Porque no soy lento, porque me he sorprendido yo mismo, creo que he estado consiguiendo cada vez más chispa. De hecho, metiéndome en el sprint me sorprendí a mí mismo. A la hora de subir tampoco subo mal. De modo que pienso que en algunas escapadas, las escapadas de media montaña son perfectas para mí. No me clasifico en un solo tipo de corredor.
¿Algún gran sueño en este deporte?
No sé si porque vengo de ciclocross, pero lo que más me gustaría, que es más factible, es ser campeón del mundo. Porque al final es un día, y aunque todo el mundo llega a tope, puedes tener la suerte de que ese día por tus compañeros o por lo que sea… puede darse. Eso es algo que siempre me ha gustado, precisamente por el ciclocross. Porque al final en el ciclocross el premio más importante es ser campeón del mundo. Algo más factible… conseguir los maillots en País Vasco en la montaña, ser más combativo y conseguir ese tipo de cosas. Eso es lo que me planteo ahora mismo.

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