Pantilimon, un refuerzo de altura para el Dépor

El último refuerzo del Deportivo, Costel Pantilimon, llega para defender la portería del cuadro coruñés junto a Tyton y para suplir la lesión de Rubén. una pieza que servirá de recambio tras comenzar la temporada con dos porteros. El cancerbero rumano destaca por su altura, que lo convierte en un portero con confianza en los balones aéreos, aunque nunca ha conseguido hacerse con la titularidad en los equipos en los que ha militado.

Costel Pantilimon comenzó su etapa de portero en su país, Rumanía, concretamente en el Aerostar Bacau, equipo en el que jugó dos temporadas pero sólo disputó nueve encuentros. Posteriormente se marchó al Timisoara, el club en el cual ha tenido más continuidad a lo largo de su carrera. En los cinco años que militó allí -entre 2006 y 2011- disputó 115 encuentros.
Tras su etapa en Rumanía Pantilimon dio el salto a Inglaterra para enrolarse en las filas del Manchester City. En tres años nunca consiguió alzarse con la titularidad y -aunque llegó a acumular 29 encuentros sobre el césped- siempre estuvo a la sombra de Joe Hart, guardavallas titular durante muchas temporadas.
Sunderland y Watford fueron sus siguientes destinos. En el primero de ellos se ganó el cariño de la afición después de jugar 29 encuentros y de dejar la portería a cero en 11 ocasiones. Pero el equipo no arrancó bien la siguiente temporada y Pantilimon acabó perdiendo su puesto fijo en la portería. Tras un mal curso, comenzó una nueva etapa en el Watford -donde apenas jugó- antes de poner rumbo al Deportivo en calidad de cedido.
Su altura es su gran virtud, pero a la vez uno de sus defectos. Los balones aéreos son su punto fuerte, aunque no transmite una gran seguridad a la hora de capturar el esférico. El uno contra uno es otra de sus características principales para un portero que -pese a alcanzar ya los 30 años-busca seguir creciendo.