El decepcionante final de Bruno Gama

Bruno Gama continúa siendo una de las grandes decepciones de la temporada en el Deportivo, por segundo año consecutivo. El portugués, que finaliza contrato el próximo 30 de junio y no continuará su carrera en A Coruña, no cuenta para Cristóbal Parralo, como tampoco entró en los planes de Pepe Mel en el inicio de la campaña. Sus pobres prestaciones han sido la nota predominante en su segunda etapa como blanquiazul.

Recuperado de sus problemas físicos, el centrocampista luso peleaba por entrar en la convocatoria para viajar a Barcelona, pero finalmente el cuerpo técnico ha preferido decantarse por Borja Valle, un comodín en el banquillo que ha demostrado implicación y hambre cuando ha disfrutado de minutos.
Gama fue alineado de inicio en la derrota copera frente a la UD Las Palmas en Riazor, en la ida de los dieciseisavos de final del torneo del KO, pero su pésima actuación no pasó desapercibida para Cristóbal Parralo, que desde entonces ha preferido apostar por otras soluciones antes que darle su confianza al ex del Dnipro.
A sus 30 años, el crédito de Bruno Gama en A Coruña parece agotado, y de hecho no se descarta que pueda salir del club herculino durante el mercado de invierno, acordando la rescisión del contrato que une a las partes hasta el próximo verano.
Su incorporación en julio de 2016 agradó a la parroquia coruñesa, que recordaba el buen fútbol desplegado por el portugués en Riazor antes de recalar en Ucrania, pero desde su regreso a Galicia jamás ha conseguido acercar sus prestaciones a las ofrecidas antaño.