Ni Morata ni Torres hacen olvidar a Diego Costa

Manuel Sánchez GómezLondres, 5 dic .- El duelo de goleadores en el Chelsea-Atlético de Madrid entre Álvaro Morata y Fernando Torres quedó sin ganador, en un encuentro sin suerte para ambos y en el que la figura de Diego Costa revoloteó en el ambiente.
Torres maquilló su encuentro con una prolongación de cabeza en un saque de esquina que permitió a Saúl rematar sin marca en el segundo palo y adelantar a los rojiblancos.
Pese a eso, su primera parte fue para olvidar, y Torres se perdió en una lucha desigual con los centrales del Chelsea, Christensen, Azpilicueta y Cahill.
El delantero era bombardeado con balones de espaldas a portería, y su tarea era bajarlos y descargar para sus compañeros. Un trabajo atípico para quien antaño acostumbraba a romper en carrera y quien dejó aquí en Inglaterra alguna memorable cabalgada del que fuera héroe en el Liverpool.
Un trabajo en el que un hombre como Diego Costa se desenvuelve a la perfección y que es su sella de identidad, por la que suspiran en el Manzanares.
No obstante, la pelea estéril tuvo su instante de respiro justo cuando el gol del Roma contra el Qarabag enfrío los ánimos en Londres.
En un saque de esquina, Torres se adelantó a todos en el primer palo y dejó el balón en bandeja a Saúl para que inyectase las últimas esperanzas a los de Simeone.
No hubo gol para el madrileño, pero sí aplausos de la grada de Stamford Bridge, que no ha olvidado sus servicios para los 'Blues' y le despidieron con un gran cariño.
Al otro lado, en la orilla del Chelsea, Álvaro Morata derrochó entrega, como acostumbra, pero con la falta de gol de la que, en ocasiones se contagia.
En la primer parte tuvo sus oportunidades, y las más claras del Chelsea nacieron de sus botas o de su cabeza, pero un Oblak imperial siempre estaba para desesperarle.
Con el gol del Atleti y el posterior empate de los londinenses, llegaron los espacios al partido, todo mucho más abierto y con posibilidades para los contraataques.
En una carrera de Cesc Fábregas, el catalán dejó solo a Morata enfrente de Oblak y el delantero, con pierna derecha, fue incapaz de superar al esloveno y lograr un tanto que hubiera dado el primer puesto en la tabla a los de Conte.
Minutos después, el madrileño sería reemplazado en el campo por Batshuayi, y el público 'Blue' no dudó en darle, como ya hicieron con Torres, una calurosa despedida.
No hubo goles ni para Morata ni para Torres, pero su entrega y lucha fue reconocida por la hinchada londinense como una muestra de que ambos han sido y son dos de los delanteros más queridos en la capital británica, aunque en las mentes de muchos, la figura de Diego Costa aparezca en cada ocasión desperdiciada.