La difícil situación de Dani Ceballos

Dani Ceballos, jugador del Real Madrid, atraviesa una complicada situación. Tras llegar a la entidad el pasado verano como uno de los grandes valores del fútbol español, el ex del Betis apenas ha disputado seis partidos ligueros durante la primera vuelta y su 'brillo' se ha ido devaluando ante la falta de oportunidades. El sevillano, que se quedó fuera de la lista ante el Celta, quiere más oportunidades. 

Fue uno de los grandes culebrones del verano. El fichaje de Ceballos rellenó durante semanas los periódicos y el trabajo realizado por Florentino Pérez para contar con su firma fue destacado por todos. Sin embargo, apenas seis meses después, el de Utrera parece ser el último hombre para Zinedine Zidane.
Llegado como mejor hombre del Europeo sub 21, casi no ha contado con minutos en LaLiga Santander (186') y sus grandes oportunidades, a pesar de haber rendido bien en sus pocos partidos ligueros, llegaron en la Copa del Rey. En Champions, sus apariciones son mínimas.
Su situación preocupa tanto a la cúpula como al público blanco, que viendo el rendimiento del conjunto en la competición casera, reclama nuevas oportunidades para la unidad B del técnico francés.

Un nuevo 'caso Casemiro'

Zinedine Zidane está tranquilo. A su espalda, casos como los de Asensio o Casemiro, hombres que llegaron muy jóvenes a Chamartín y que, tras un año cedidos lejos de la casa blanca, acabaron siendo hombres importantes en sus alineaciones. La idea del preparador se repite con Ceballos.
La intención del técnico es que el sevillano se marche cedido a un club de primer nivel con el objetivo de acumular minutos en un contexto parecido al del equipo blanco. Aunque dicha oportunidad llegaría, siempre según las intenciones del entrenador, a partir de junio. Salir en enero, no es una posibilidad que contemple el entrenador.
Con todo ello, la situación se complica para el mediapunta. Sin minutos -por el momento- en el once blanco, Zidane cuenta con él como hombre de banquillo-reserva, como mínimo, hasta junio. El mejor jugador del último europeo llama a la puerta y, por el momento, el preparador francés no concede nuevas oportunidades.