Más Luca que Zidane

Debutar en el Real Madrid nunca es fácil. Si a dicha dificultad, se suma la 'cualidad' de ser el hijo del entrenador de la primera plantilla, el reto es enorme. La historia la protagoniza Luca Zidane, hijo de Zinedine Zidane, que este sábado ante el Villarreal consiguió, con nota, debutar en la máxima categoría española. 

Su titularidad sorprendió a todos y los comentarios sobre la conveniencia, o no, de la misma, tampoco se hicieron esperar. Luca Zidane consiguió, casi sin desearlo, convertirse en el gran atractivo de un partido que apenas tenía emoción más allá de evitar posibles lesiones con la mirada puesta en Kiev.
Su calentamiento, señalado hasta por la propia cuenta oficial de twitter de LaLiga Santander. Él lo sabía, pero no se escondía. Sonreía, comentaba con sus compañeros e incluso intercambió algunas palabras con su padre -hoy su entrenador- en el túnel de vestuarios. 
Sin embargo, más allá de las bromas, de los posibles rumores y de todo lo que rodea ser el hijo de uno de los mejores jugadores de la historia y actual entrenador de la entidad blanca, Luca demostró tener más suyo propio que de su padre. Sus méritos le han llevado a la portería.
Ante el Villarreal, que no fue fácil, completó una actuación llena de altibajos. Agarrando varias paradas de mérito ante los disparos amarillos, no pudo hacer mucho más en el primer golazo local, pero sí erró en el segundo de Samu Castillejo. Al finalizar el encuentro, todos sus compañeros se acercaron a saludarle y felicitarle por su actuación.
El meta blanco, al menos este sábado, fue más Luca que Zidane.