20 millones de superávit

El Málaga cierra el mercado de fichajes con un balance económico más que favorable. El club ha cerrado este periodo estival con tres grandes traspasos realizados que han reportado a las arcas de Martiricos 30 millones de euros más otros dos en variables. Sandro Ramírez se marchó al Everton a cambio de seis kilos, Fornals dejó 11 y Camacho puso rumbo a la Bundesliga por 13 millones más otros dos en variables.

Además, el Málaga ha ingresado un millón de euros del Real Madrid pactado en el traspaso de Isco. Si los blancos vuelven a ser campeones este año, tendrán que pagar otro millón al equipo blanquiazul.
En cambio, el club ha desembolsado 11 millones en fichajes, repartidos de la siguiente forma: Roberto (1 millón siempre y cuando el club logre la permanencia), Cenk Gönen (200.000 euros), Diego González (2 millones), Cecchini (4,6 millones) y Esteban Rolón (3,2 millones). 
A estas cifras habría que añadirle los 1,3 millones en variables que el Málaga pactó con el Espanyol en el traspaso de Roberto. Pero dejando a un lado dichas variables, el club blanquiazul ha cerrado el periodo estival de fichajes con un superávit de 20 millones de euros.
Diez caras nuevas, los regresos de Kuzmanovic, Juankar y Cifu, 18 salidas y 20 millones extras en la cuenta corriente blanquiazul. Este es el saldo que deja el verano en La Rosaleda.