Nuestro futuro europeo, en nuestras manos
Fracaso. Es el adjetivo que mejor describe los últimos acontecimientos que rodean a la vida de los Sevillistas.
Pero esta semana, eso no importa.
No importa que despidiéramos a nuestro entrenador a falta de 10 jornadas o que todavía echemos de menos en el fondo a Juande Ramos. No importa que aún no nos hayamos recuperado de la derrota ante el CSKA en Champions League o que pensemos que Monchi puede estar perdiendo su rumbo.
Lo que importa es que la temporada, con sus altibajos, termina este sábado a las 10 de la noche en el Estado de los Juegos del Mediterráneo.
Controlamos nuestro destino. Es sencillo. Ganamos y estamos dentro. Perdemos y acabamos en nuestros antiguos feudos de la Europa League (Copa de la UEFA).
Nos hemos enfrentado al Almería en cinco ocasiones en los últimos tres años, perdiendo dos partidos cuando Unai Emery llevaba el rumbo de los almerienses y ganando en los tres últimos encuentros (celebrados en sábado).
Hemos luchado esta temporada para tener una oportunidad ahora de hacer las cosas bien. A pesar de cambios de entrenadores, de derrotas inexplicables y retornos inesperados, hemos llegado a este punto.
Y ahora, nuestro futuro Europeo está en nuestras manos.
