Milan-Betis, diez años de sueños dispares

Fuegos artificiales, gol, alegría y pasión. Cien años de historia del Real Betis culminados ante el rival más digno posible, uno de los históricos, el segundo club más laureado de Europa. Los Kaká, Seedorf, Cafú, Pirlo y compañía visitaban el Benito Villamarín para culminar una de las citas más bellas que se recuerdan en Heliópolis. Un encuentro que celebraba la irregular, única y admirable historia de un equipo que pediría un sueño, el de codearse con los más grandes de Europa. Aquél mismo que sigue sin cumplirse...

Un centenar de velas sopladas crepitaron con el gol de Mark González, para el delirio de los allí presentes. La diana que derrotó a los campeones continentales haciendo gala a la historia de David y Goliat. El penalti que arrodilló al equipo del mejor jugador del mundo. El espectáculo estuvo servido dentro y fuera del terreno de juego. La locura instaurada por la victoria y el gol fue lidiada con los fuegos artificiales y el 'teatro' brindado por Manuel Ruiz de Lopera, que volvió 20 meses después a su palco. Todo ello ante la indiferencia de los más de 55.000 aficionados que abarrotaron las gradas.
Este miércoles 9 de agosto la historia se vuelve a repetir, justo diez años después del un amistoso para la historia. Esta vez en Catania, con un Milan repleto de savia nueva, renovado y desesperado por volver al lugar que le pertenece. Un conjunto reforzado a base de talonario con una única opción, volver a codearse con los más grandes de Europa.
Diez años más tarde, los sueños pedidos de aquella noche siguen sin avistarse por un Villamarín que ansía noches como aquella Enfrente un Real Betis pobre que sigue sin encontrar la sintonía con el juego que propone el técnico y que sigue decepcionando en lo que lleva de pretemporada. Por delante el Milan e Inter de Milan, dos pruebas de toque idílicas para definir el once titular y los protagonistas que disfrutarán del debut liguero ante el Barcelona.