Lo que puede pasar en 6 minutos fatídicos
Valencia Basket se enfrentó este miércoles a Khimki Moscú en la vuelta de los cuartos de final de la Eurocup. Con una ventaja de apenas un punto para los rusos, la esperanza de una victoria taronja era más que real. Mirando la vista atrás, el partido hasta se afrontaba con una tímida pero gran sonrisa. Se compitió y luchó en Málaga, se reaccionó en la ida ante Khimki y se pasó por encima del todopoderoso Barcelona. Sin duda, hechos y momentos que llenaban de confianza la mente del aficionado más exigente pese a que la baja de Sam Van Rossom pusiera la nota triste al inicio de semana. Pero todo se iba a torcer en seis minutos.
En el partido entre Khimki Moscú y Valencia Basket había mucho en juego para el cuadro taronja. Ya no solo estaba en peligro esta temporada sino parte de la que viene. El hecho de jugar Euroliga es el principal aliciente a la hora de firmar o renovar a ciertos jugadores. Había que ganar sí o sí. Al descanso, el marcador era de 42-36 para los rusos. La diferencia era de seis puntos fruto de un triple espectacular de Sergey Monia. Valencia Basket perdía, sí, pero estaba todo abierto. Hasta que se volvió de los vestuarios. Algo debió pasar en el túnel del Basketball Center de Moscú para que Valencia Basket saltara así a la pista.
Un 11-0 de salida condenó a Valencia Basket
En los primeros 6 minutos de la segunda parte, Valencia Basket no solo no anotó sino que recibió un parcial en contra de 11-0. Todo lo positivo realizado en la primera parte se había ido al traste en solo 6 minutos de tercer cuarto. Ya no se encontraba a Bojan Dubljevic en el poste bajo, Guillem Vives ya no penetraba, Pablo Aguilar se dejó todo el acierto en la Fonteta... Solo Nemanja Nedovic sacó el orgullo para intentar devolver a Valencia Basket a la eliminatoria. Pero si algo tiene la Eurocup y si algo tienen equipos como Khimki es que no perdonan un bajón de este tipo. La diferencia pasó de solo 6 puntos a 17 en un abrir y cerrar de ojos. Y es que cuando Valencia Basket intentó reaccionar gracias a un tocado Nemanja Nedovic, Sergey Monia y Petteri Koponen se levantaron desde más allá del 6,75 para hundir cualquier esperanza de épica taronja.
Esos seis minutos dejaron sin opción alguna a un desdibujado Valencia Basket que recordó más al de principio de temporada que perdía ante Ploiesti que al que era capaz de pelear en Málaga o de ganar al Barcelona. Se avecinan tiempos difíciles en la Fuente de San Luis. Casi con la Euroliga descartada, Valencia Basket tendrá que confiar en la mano de Chechu Mulero (director deportivo) para capear el complicado temporal que se viene encima a partir de ahora.
Carlos Martínez
Periodista / Comentarista RadioEsport
