La vida sigue igual

Año nuevo, césped nuevo, el mismo Real Valladolid Promesas. Era día de estrenos en los Campos Anexos, pero la vida para el conjunto de Rubén Albés sigue de la misma manera que dijo adiós a 2016: con una temporada sobresaliente y cobrándose una nueva víctima. En esta ocasión le tocó morder el polvo al Coruxo FC, un equipo que, hasta hoy, no había caído derrotado nunca frente a los blanquivioleta.

 
El partido se iniciaba con mucha tranquilidad, como suele ser habitual tras un parón de varios días. Ambos equipos se tanteaban sin apenas crear peligro, pero, pronto, el filial encontraba la posesión y comenzaba a carburar. La banda izquierda mostraba protagonismo en ataque y, gracias a la movilidad de Dani Vega, los delanteros empezaban a disfrutar de oportunidades que no inquietaban demasiado a la meta gallega.
Sin embargo, las pérdidas lastraban a los de Albés y el entrenador movía pieza. Situaba a Manel Royo por delante de la defensa y retrasaba a Roberto Corral, que había empezado de extremo. Antes del descanso, el conjunto verde metía el miedo en el cuerpo a los locales, primero, con un disparo cruzado de Jorge Fernández que se marchaba fuera y, poco después, tras un servicio del mismo futbolista que convertía en gol Alberto García, antes de que Leo Ollo lo anulara por fuera de juego.

Los cambios, decisivos

El Real Valladolid B lo dejaba todo para una segunda parte que daba comienzo con un cambio. Anuar Tuhami, que no estaba para noventa minutos, regresaba tras su lesión dando el relevo al juvenil Juan Iglesias y enseguida ponía el punto necesario al duelo. El ritmo aumentaba de forma considerable y, aunque los de Rafa Sáez tenían la opción en dos disparos del exblanquivioleta Iosu Villar y de Quique Cubas, daban un pasito atrás, acobardados por la mejoría del filial.
Corral llegaba con facilidad al área visitante y Dani Vega continuaba poniendo en jaque a la defensa viguesa. A pesar de ello, el Promesas no lograba abrir la lata. Era el momento de José Luis Sinisterra y David Mayoral, el último también renqueante, que entraban al campo en ayuda de sus compañeros. El colombiano tuvo una buena opción con un remate ajustado al palo, pero sería el abulense el que encontraría el camino después de una gran jugada personal. Su asistencia dejaba solo a Vega, que cruzaba el balón y no perdonaba ante Alberto Domínguez. Instantes después llegaba el 2-0, también obra del extremeño, esta vez tras un centro medido de Anuar al segundo palo desde la derecha.
Dos goles para cerrar el partido y una más que merecida victoria, sustentada en los hombres de refresco y con Dani Vega como protagonista. Los chicos de Rubén Albés ya suman 35 puntos, cada vez más cerca de su objetivo, en un recién estrenado año en el que prometen seguir dando mucha guerra.