"Para mí esto es difícil de manejar: nos falta alma"

Desolado y desesperado tras consumarse la quinta derrota, Paco Herrera se sentó en la sala del Ciutat de Valencia reconociendo que "no tengo muchas explicaciones y las que tengo me las tengo que guardar. Podría decir una barbaridad". El técnico extremeño pasó de mostrar una defensa y una confianza férrea en su plantilla durante las últimas semanas a exponer una crítica de lo que no se puede consentir. "Nos han hecho gol de un saque de banda. ¡De un saque de banda! ¿Que es entrenable? Supongo que sí, pero yo no me pongo a entrenar un saque de banda", decía con un notable enfado.

 
Herrera analizaba el encuentro detallando que "hemos empezado bien, con 20 minutos buenos. Hemos hecho un gol y nos hemos asustado. Después hemos empezado a jugar hacia atrás (...) Como no había nada que perder empezamos a jugar (...) Cuando ellos se han puesto hacia adelante otra vez hemos jugado bien".
Con cara y voz de circunstancias, Paco Herrera reconocía que "para mí esto es difícil de manejar. Nos falta alma para que los partidos no se nos vayan. Estábamos haciéndolo muy bien y nos falta alma. Nos falta carácter y esas cosas que son difíciles de definir".
Cuestionado sobre si el Real Valladolid no tiene una idea clara de juego, su respuesta fue dudosa: "Puede ser, puede ser, puede ser. Pero yo en esos 20 minutos he visto a un equipo que quería tener la pelota y que quería atacar. A partir del gol esto se ha convertido en otra cosa". Y esta vez no quiso excusar la juventud de sus jugadores: "Se puede ser joven y atrevido. Eso ya no es una excusa".
De nuevo preguntado por una posible destitución, se limitó a decir que "puede ser. Es fútbol". Lo hizo antes de sacar sus últimas fuerzas en la sala de prensa: "Yo las he visto de todos los colores, esperemos que sea entrenable y el equipo cambie esta mentalidad. Es mi responsabilidad buscar todas las armas que pueda".