Herrera y la "sangría" en la estrategia defensiva

En la ingrata igualada (1-1) ante el Córdoba en El Arcángel, el Real Valladolid volvía a los problemas que ya tuvo hace unas semanas con el balón para defensivo. Son muchas las acciones de este tipo que penalizan a los pucelanos y el Paco Herrera se mostraba tan sorprendido como enfadado. El preparador pucelano calificaba de "sangría" la situación que vive el equipo y pese a asegurar que "estamos tratando" de corregirlo, las pruebas y los resultados demuestran que el objetivo no se cumple.

 

Un porcentaje muy alto

Cuestionado, nuevamente, por el problema pucelano a balón parado, Herrera reflexionaba a nivel global. "En los partidos, el 90% de los goles son errores del contrario". Desde ahí "hay que hacer otro tipo de análisis" y e que él hace hacía de "nuestro gol es que no me gusta". No le convence porque "estamos sufriendo muchísimo en los saques de esquina y las faltas". La situación se define con que "es una sangría".  Aunque reconoce que "somos un equipo bajito" espera que el trabajo dé sus frutos. "Estamos tratando de corregir y lo hemos hecho en cierta medida", afirmaba.

¿Y Becerra?

Con estos problemas defensivos, el primer señalado es el portero. Isaac Becerra está cuestionado pero al míster no le preocupa. "Es así", aseguraba mientras afirmaba que "le conozco bien" porque "le tuve tres años en el Espanyol y su manera de ser no le permite estar tranquilo". Además, "el año pasado se encontraba con tres centrales de 1,90 que le sacaban todo" y ahora todo es diferente. "Se daña a si mismo queriendo ser perfecto", cree un entrenador que afirma que "tiene ese carácter, para bien y para mal".