Jaime, sí; Mata, no

Durante el pasado verano, el Real Valladolid se hizo con la propiedad de Jaime Mata. Braulio Vázquez, en una operación en la que había trabajado durante mucho tiempo, arrebataba el jugador a equipos de mayor fuerza y presencia. Pese a que se hablaría de interés de clubes de Primera División, el jugador madrileño dejaba el Estadio de Montilivi para llegar, por dos temporadas, al Nuevo Estadio José Zorrilla. Una brillante operación que aplaudía el entorno blanquivioleta. Se cerraba un '9' de trabajo, brega y lucha sobre el que Paco Herrera no dudaba. Le guardaba un puesto privilegiado en las primeras semanas de competición. Pese a estar fuera de su zona de influencia, el ex del Girona Fútbol Club disputaba íntegros los primeros tres partidos de 'LaLiga 1|2|3'.

 
Con esos 270 minutos, el madrileño firmaba lo que es, por el momento, más del 44% de sus minutos actuales. Desde entonces, ha ido a menos. Pasaba de ser el jugador estrella y fichaje de renombre a una opción más que, con el tiempo, trascendería a un futbolista con un mes entero sin disputar ni un solo minuto de juego. La caída del jugador es tal que, actualmente, es visto como una de las últimas opciones ofensivas del equipo. Pese a la lesión de Jose Arnáiz, otros jugadores como, sobre todo, Raúl de Tomás, pero también, por ejemplo, Dejan Drazic, parecen tener un puesto más determinante para los próximos partidos.
Descartado para la victoria (1-2) en el Nou Estadi de Tarragona y en el empate (0-0) ante el Real Zaragoza, el madrileño vive un mal momento que comenzó cuando menos lo esperaba. En la séptima jornada, en la derrota (1-2) ante la Sociedad Deportiva Huesca, cuando ya había perdido su rol de jugador importante, fue expulsado estando en el banquillo. Una mínima protesta sobre el asistente le costaría una sanción de dos partidos que ha debilitado la confianza del jugador.

Su expulsión

Tras volver de aquella sanción, disputó 70 minutos en la clasificación copera (3-1) ante el Club Deportivo Tenerife pero, después, se quedó fuera de las dos siguientes citas ligueras. Así, cuando este pasado sábado era de la partida en el Nuevo Estadio de El Arcángel, Jaime Mata regresaba a la competición liguera tras 39 días. Seis partidos después el jugador volvía a la 'Liga 1|2|3' para disputar un encuentro muy discreto. Sustituido por Paco Herrera en el minuto 67, el madrileño sigue adoleciendo de aclimatación al sistema diseñado por el entrenador pacense.
El juego exterior sobre el que es exigido carece de la versión de área de un jugador que no escatima en pundonor. Como ya hizo en el duelo ante e Rayo Vallecano en Vallecas, el '9' pucelano expone toda su potencia, su fuerza y su coraje. No le falta actitud pero sí mucho acierto y esa confianza que todo jugador de área necesita. Jaime Mata no está en ese momento y el futbolista vive añorando un gol que le ayude a recuperar ese nivel por el que fue llamada por el Real Valladolid el pasado verano y que no es otro que el que le ha valido para pelear por llegar a Primera. Pese a ese punto diferencial que le ayude a 'matar' su trabajo, el madrileño no duda en el esfuerzo, aquél que le engrandece como profesional y que nunca le hará perderse en el trabajo ni en la dinámica del equipo.