Toca levantarse

Con el play off de ascenso cada vez más lejos, ya a nueve puntos, tras no superar el examen de Pontevedra, el Real Valladolid Promesas enfila la recta final del campeonato con el objetivo de salir de la mala dinámica de resultados en la que se halla desde hace unas cuantas jornadas. En los últimos encuentros, el conjunto blanquivioleta ha cosechado tres derrotas de forma consecutiva, sumando un solo punto de quince posibles, lo que no empaña la gran temporada que está llevando a cabo.

 
La nueva oportunidad para lograrlo se le presenta en casa, donde más fuerte se ha mostrado, ante uno de los equipos teóricamente más potentes del Grupo I de Segunda División B, el Racing de Ferrol, que, sin embargo, no ha ofrecido las prestaciones que se esperaban. Justo hace una vuelta, su entrenador, Pichi Alonso, era sustituido por un viejo conocido de la parroquia coruñesa: Miguel Ángel Tena. Un técnico que abandonaba la nave racinguista al final de la pasada campaña, tras el play off de ascenso. En la actual, ha conseguido enderezarla tras un comienzo complicado, para sacar al equipo de los puestos peligrosos y ubicarlo en la zona media, tan solo cuatro puestos y puntos menos que el filial, después de la victoria del pasado miércoles en partido aplazado.
Los ferrolanos se presentan en Pucela sin uno de sus jugadores más destacados, el exprimera Dani Benítez, que intenta sacar la cabeza en la categoría de bronce del fútbol español. Por su parte, Rubén Albés, salvo al lesionado David Deve, tiene a toda la plantilla a su disposición, incluyendo a Anuar Tuhami, no convocado con el primer equipo, y al juvenil José Luis Sinisterra.
El encuentro tendrá lugar el domingo a partir de las 12.00 horas en los Campos Anexos al Nuevo Estadio José Zorrilla y será arbitrado por el extremeño Carlos Sánchez Laso, que a lo largo de su carrera ha pitado al Promesas dos partidos, saldados con derrota, y cuatro a los gallegos, con uno perdido y tres ganados.