¿Era el último tren?

No sería la primera vez que Paco Herrera reconoce que echa cuentas. Y eso que la calculadora le está fallando en Valladolid más que en otras ocasiones. Por ejemplo, en el partido frente al Nàstic de Tarragona. Era una jornada en la que el técnico extremeño contaba con los tres puntos y su equipo no sumó ni uno. Sin embargo, en la rueda de prensa posterior al encuentro no quiso dar las esperanzas que anunció en la previa, el pasado jueves.

Como si oliese el batacazo, un periodista preguntó a Herrera si el partido frente al Nàstic era el último de la temporada hacia el play off. El entrenador pareció agradecer la cuestión y, lejos de no valorar como una opción la derrota, respondió con claridad que todavía queda Liga 1|2|3 para remontar y meterse entre los mejores: "Claro que no, para nada. Así es. Pienso así porque estamos muy cerca de todo y nuestro momento bueno vino a partir del Alcorcón. Quiero pensar igual y creer que este no es el último tren".

Cambio de discurso

Tras el pinchazo y con el técnico posiblemente pensando lo mismo que 48 horas antes del partido frente al conjunto de Juan Merino, su discurso cambió por completo e incluso apuntó a la importancia de sumar seis puntos cuanto antes para olvidarse de lo de abajo: "la primera valoración que hago es la de ganar dos partidos, así no habrá posibilidad como la del año pasado", apuntó.