La oportunidad soñada

El Real Valladolid sueña con jugar el cuarto play off de su historia. En el primero de ellos fue en 2010. En aquella campaña el entrenador blanquivioleta era Abel Resino. El toledano hizo famosa la frase de "fútbol es fútbol". El exportero no buscaba lógica a lo que ocurre en este deporte y es bajo esta directriz sobre la que se puede defender la situación actual del equipo de Paco Herrera. El actual Pucela tiene opciones de estar entre los seis mejores clasificados a final de temporada. Es una opción sorprendente pero real pese a que el Real Valladolid haya perdido 14 partidos. Es más, es una posibilidad pese a que los blanquivioleta hayan visto volar 22 puntos del Nuevo Estadio José Zorrilla y pese a que como local los vallisoletanos sólo hayan ganado el 50% de sus partidos.

 
El camino no ha sido fácil, todo lo contrario. Las críticas han sido elevadas. La irregularidad ha sido patente en toda la temporada, pero tras la victoria (0-3) ante la Unión Deportiva Amería, el Pucela puede estar entre los mejores de LaLiga 1|2|3. Puede estarlo desde la visita del Real Club Deportivo Mallorca. El equipo de Sergi Barjuán llega a Valladolid como la primera piedra que los pucelanos deben regatear si quieren estar en la soñada promoción. Pese a que nuestros lectores regalan al equipo la opción de un fallo, la realidad es que este no puede fallar ante los bermellones.
La visita de los mallorquines y el viaje blanquivioleta al Estadio de Anduva, donde ya hay confirmados casi 300 aficionados, son un mismo partido. Conseguir ambas victorias se ha tornado en una obligación para los pucelanos. Es mucho más que un objetivo. Ha llegado la oportunidad soñada y ésta pasa por conseguir los seis próximos puntos. Con ellos, el sueño es posible. Sin ellos, el sueño quedará más lejos y el partido en el Estadio de los Juegos Mediterráneos será, simple y llanamente, una intrascendente victoria.

Necesidad en el rival

Esperando que lo conseguido ante el equipo de Luis Miguel Ramis sea ese punto de inflexión soñado durante toda la temporada, Paco Herrera podrá dar continuidad al último once titular. Con las bajas de Alberto Guitián y Sergio Marcos, el entrenador pacense ha visto que Raúl de Tomas y Jose Arnáiz están de regreso. Sus molestias en el último duelo no han sido graves y ambos, referentes en el juego ofensivo, están disponibles para un duelo en el que Rafa López y Guzmán Casaseca verán desde la grada.
Ni el pacense ni el vallisoletano entran en una citación para un partido definitivo. Ante un rival en una constante agonía pero agarrado a la esperanza que regala su tercer entrenador de la temporada, el Real Club Deportivo Mallorca vive pendiente de su objetivo. En la eterna pelea de no perder la categoría en la que está involucrado desde hace cuatro años, el duelo de este sábado es un partido exigente y casi definitivo para ambos. En unos, los locales, por la búsqueda de ese sueño que han cerrado en varios ocasiones y en otros, los visitantes, por la gran necesidad de conseguir la salvación que, hace un año, firmaron en el propio feudo blanquivioleta.