Todo pasa por Anduva

El pasado 16 de abril, el Real Valladolid cerraba la temporada. La tremenda goleada (6-2) recibida ante el Sevilla Atlético obligaba a dejar en el olvido la presente campaña. Ya nadie creía en el equipo. Ni en el vestuario ni en Paco Herrera. El Pucela estaba muerto pero, por sorpresa, sacó fuerza y, con 10 de los últimos 12 puntos, una cifra insuperable en la categoría, los vallisoletanos visitan este domingo al Club Deportivo Mirandés con la opción de llegar a los tres últimos partidos de la temporada desde los puestos de play off. Ganar o empatar en el Estadio de Anduva significa afrontar la visita del Getafe CF desde la zona de promoción. El sueño que, ahora, está sobre la mano, se cumpliría cinco semanas después del fracaso del Estadio Ramón Sánchez Pizjuán.

 

Importante apoyo

La opción está en la mano del Real Valladolid, un equipo que, por fin, tiene una identidad. Por tercera semana consecutiva se podría repetir once. Paco Herrera ha dado con la tecla en su vestuario y, confirmada la presencia de Raúl de Tomás en la convocatoria, después de que el míster la pusiera en duda, el once titular será, salvo gran sorpresa, el mismo de las últimas dos jornadas. En una semana marcada por la salida de Braulio Vázquez del Nuevo Estadio José Zorrilla, el Real Valladolid parece haber encontrado sobre el césped la estabilidad de la que carece en las oficinas.
Bajo ese sosiego que han dado las últimas dos victorias, la unión con el gol de Raúl de Tomás, el liderazgo de Jose Arnáiz y la velocidad de Cristian Espinoza, este Pucela está ante la oportunidad de llegar a su objetivo cuando de verdad es necesario. La tendencia positiva del Real Valladolid le empuja al play off y hace que éste sea un equipo peligroso a estas alturas de la temporada. Con la disputa de "finales" de verdad en los momentos decisivos, los de Paco Herrera se basan en su equilibrio encontrado para sostener esa emoción e ilusión. Todo parece posible cuando al equipo ya se le daba por muerto.
Sólo un mes después del ridículo de Sevilla, el Real Valladolid se desplaza hasta Miranda de Ebro con dos éxitos rotundos. A la opción de llegar a la cuadragésima jornada liguera en zona de play off hay que sumar el hecho de que el equipo viaje con casi 1.000 aficionados. Los jugadores han creído. La afición, también. Todos han contribuido para seguir creyendo, como afirmaba Joan Jordán esta semana.

Margen de error

Bajo la dirección del árbitro vasco Aitor Gorostegui Fernández-Ortega, el Real Valladolid pone a prueba todas sus opciones. Anduva marca el futuro. Es cuestión de ser o no ser equipo de play off cuando sólo restan 270 minutos para el final de la liga regular. Con duelos ante Getafe CF y Cádiz CF en Zorrilla, el futuro pasa por Anduva. El sueño blanquivioleta se calibra en Miranda de Ebro. En el mismo estadio en el que la pasada temporada se perdió un sueño, el Real Valladolid puede crear ya no una ilusión sino una realidad.