Triste y lamentable final

El Real Valladolid se jugaba el objetivo. Está muy difícil pero son los últimos minutos del partido y Juan Villar anota el tanto de la victoria blanquivioleta ante el Cádiz CF. El onubense se quita toda la presión acumulada en las últimas semanas y celebra con mucha rabia el gol de la victoria. Se encara con la grada del Nuevo Estadio José Zorrilla y pone punto y final a su paso por el Real Valladolid de la peor forma posible. Un cierre triste y lamentable para una etapa importante para el jugador y que deparaba grandes cifras para los intereses pucelanos. Tras 52 partidos, 4.927 minutos como blanquivioleta y 25 goles, la etapa del '7' de blanquiviolta terminaba manchada por su más que posible marcha al Club Deportivo Tenerife.

 
Acusado de falto de interés y escasa profesionalidad, Juan Villar se liberaba tras un tanto que podía tener su peso en oro pero que no hizo más que aumentar el triste final de un jugador que hace un año fue vital para que el Real Valladolid pudiera salvar la categoría y que lo hizo desde un sacrificio físico importante, como aseguraba Alberto López tras el partido de la salvación en el Estadio Manuel Martínez Valero de Elche. El esfuerzo de la temporada pasada y la validez y la importancia de sus goles ya quedaban en un segundo plano. Juan Villar estaba sentenciado. El onubense ya había sido castigado desde la dolorosa derrota (6-2) ante el Sevilla Atlético. Lo ocurrido en el Ramón Sánchez Pizjuán era el punto y final.
Antes de su final, la temporada de Juan Villar no estaba teniendo la importancia de la campaña pasada. Lesionado en la recta final de la pretemporada, al '7' le costó hacerse con un puesto de titular y de forma fija en los esquemas de Paco Herrera. Sin debutar hasta la quinta jornada, la primera titularidad sería en la derrota (1-2) ante la Sociedad Deportiva Huesca. Le costó entrar, fue difícil que se hiciera fijo y nunca consiguió acumular partidos completos. En sus primeros 14 partidos de la temporada, sólo consiguió disputar completos dos. No era su temporada pero siempre tenía ese acierto goleador que se le pedía y que le hacía, dentro de su bajón de juego, relevante.

Siempre en el mercado

Con su facilidad para encontrar puerta, Juan Villar siempre estaba con opciones de ser titular pero, durante esta temporada 2016/2017, siempre lo hizo desde el peso y el lastre de estar siempre en el mercado. Tentado para llegar a Primera división durante el pasado verano, Juan Villar y el Club Deprotivo Leganés estuvieron unidos durante toda la temporada. Asier Garitano daría todo por llevarse al onubense mientras el Real Valladolid le ofrecía la renovación. A la exigencia deportiva, Juan Villar atendía la responsabilidad de las negociaciones y las opciones de salir del Nuevo Estadio José Zorrilla.
Todo esa pelea y lucha se terminaría al filtrarse que su etapa en Valladolid terminaba y que el '7' había firmado por el Club Deportivo Tenerife. Su firma pero, sobre todo, la exposición de ésta, dejan como villano a una de las grandes estrellas del Real Valladolid de las últimas dos temporadas. 25 goles y más de 20 puntos no pueden tapar su lamentable salida pero tampoco deben señalarle como e jugador que no es.