Puntos de gran pegada

Como no podía ser de otra forma, el camino de vuelta a la senda del triunfo para el Real Valladolid estaba marcado por una gran cantidad de goles: tres, para ser más exactos. Deivid Rodríguez que se estrenó como profesional, Jaime Mata que sumó la enésima diana a su cuenta personal e iguala sus mejores registros de cara a portería y un Míchel Herrero que sentenció ante sus excompañeros. Tres tantos para dar tres puntos a base de pegada y que el Pucela vuelva por los fueros de la victoria como lo dejaron: anotando mucho.

Antes de entrar en un pequeño bache de resultados que ha durado cinco jornadas en las que los de Luis César Sampedro no conocieron el dulce sabor del triunfo, el Real Valladolid había firmado sus últimas victorias ante la AD Alcorcón y Córdoba CF. Los blanquivioleta vencieron 4-0 a los alfareros y 4-1 a los franjiverdes, con la alegría ofensiva que ha caracterizado la andadura del actual Pucela. Dos goleadas antes de afrontar una sequía de puntos que ha vuelto a la normalidad con otra lluvia de tantos, con tres, ante el Real Oviedo.
La nota negativa, también como viene siendo habitual, llegó a la hora de repeler las ofensivas carbayonas. Jordi Masip estuvo a punto de sumar la tercera porteía imbatida del curso, pero el tanto ovetense llegó en los instantes finales y sumió al Nuevo Estadio José Zorrilla en un sufrimiento que, eso sí, no tardó en desvanecerse. Míchel Herrero puso la puntilla a su ex equipo y rubricó la goleada blanquivioleta que puso de manifiesto que el Real Valladolid sigue teniendo mucha pegada. Y eso se traduce en puntos para el Pucela.