"¡Por fin!; nos lo merecíamos"

"¡Emocionante, y mucho!". Así calificaba Miguel Ángel Portugal el "partidazo del equipo" en Oviedo: "Dimos nuestro mejor nivel en un magnífico escenario y ante un magnífico rival, que por primera vez en la temporada encadena dos derrotas seguidas. Por fin, la pelotita quiso entrar, en parte, por el compromiso de gran trabajo como bloque tanto atrás como en ataque. Nuestro partido fue un ejemplo de equipo sólido, firme y ambicioso y, también, de acierto goleador. ¡Por fin!".

 
El técnico destacaba el trabajo de cada línea: "Entramos muy bien en el partido. Supimos aguantar las oleadas del Real Oviedo, pero sin pasar apuros, y estuvimos mucho más finos en todas las facetas que en jornadas anteriores. Nuestro centro del campo hizo un trabajo espléndido, con un ensamblaje perfecto, con los hombres de atrás y los delanteros, que también estuvieron muy acertados. Los cuatro goles, que bien hubieran podido ser alguno más, demuestran nuestra calidad para fabricar ocasiones, remates, y para golear".
Para el burgalés: "lo sucedido hasta ahora no era normal y el sábado alcanzamos la normalidad. Nos lo merecíamos; ya era hora. La victoria pone premio a muchas semanas de trabajo y a algún mal sabor de boca por resultados injustos".
Pero a pesar de la imagen mostrada y la victoria, aún no se ha conseguido nada. Y Portugal lo sabe, aunque se muestra optimista: "Éste es el primer paso de una carrera difícil pero para la que nos llevamos preparando mucho tiempo. Lo mejor está por llegar y estamos preparados para que no se nos escape y disfrutarlo con toda nuestra gente que nos quiere y cuida con esmero, en los malos y buenos momentos. Tuvimos el apoyo incondicional de 1.500 valientes que, también, golearon a la buena afición ovetense. Estoy muy orgulloso de mis jugadores y de mis aficionados... ¡Gracias!", concluía.