Dos partidos, dos remontadas en contra

Mal comienzo de temporada para un Celta de Vigo que se va al parón de selecciones con cero puntos en su casillero y cinco goles en contra. Dos derrotas, ante la Real Sociedad y el Betis, en la que los de Unzué se adelantaron en el marcador, pero vieron como, con el paso de los minutos, sus rivales lograban darle la vuelta al resultado.

 
El Celta se adelantó dos veces en el marcador ante el cuadro donostiarra en la primera jornada de Liga, dos tantos de Maxi Gómez, el único celeste que ha visto puerta en este curso, hacían soñar al celtismo con un triunfo que por juego fue merecido. Pero dos errores, uno de Sergio Álvarez y otro de Jonny, a los que se le tiene que sumar el error de Mateu Lahoz al señalar como penalti una falta fuera del área, propiciaron la primera derrota de la temporada. 
Las sensaciones del debut oficial del Celta de Juan Carlos Unzué no fueron malas, el equipo tuvo ocasiones, jugó más y mejor que la Real, pero se le notó cansancio en las piernas en la segunda mitad, justo lo que también ha sucedido ante el Real Betis, donde los celestes llegaron completamente extenuados al final del encuentro. No hubo arreón en los últimos minutos, apenas un par de disparos lejanos de Hugo Mallo y uno que se fue arriba de Maxi Gómez.
Ante el Betis, salvando la diferencia de juego ya que en este partido el equipo apenas pudo proponer nada, se ha repetido la misma situación que ante la Real Sociedad. Los vigueses se volvían a adelantar con un testarazo de Maxi Gómez que impactó en Camarasa. Un buen centro de Guardado habilitó a Sergio León para conseguir el empate antes del descanso, una acción en la que el delantero cordobés no estaba cubierto de forma correcta por Roncaglia.
Tras el descanso el Celta volvió a saltar al Benito Villamarín con demasiados miedos, el equipo se dejó dominar por un Betis que se gustaba y perdió la posesión de la pelota. Cuando logró recuperar el control, se vio a un equipo con muchas dificultades para llegar a la meta rival sin los chispazos de Pione Sisto y Aspas, que no han comenzado bien el curso.
Y en el minuto 77 Sergio Álvarez, que esta noche realizó un par de intervenciones de mucho mérito, tuvo que recoger el balón en el fondo de su portería por segunda vez. Un nuevo cabezazo, está vez en un córner sacado en corto por Joaquín a Guardado, sirvió para que el Betis le diese la vuelta al marcador gracias al tanto de Feddal. 
Una nueva remontada en contra, la segunda en los dos partidos disputados, que deja patente que al Celta aún le faltan muchos conceptos por asimilar, como reconoció el propio Unzué. Ahora el equipo tendrá dos semanas para preparar el duelo ante el Alavés, faltarán los internacionales, pero hay mucho trabajo por delante para que esta circunstancia no se vuelva a repetir.