Tres ventas invernales, tres salidas radicalmente distintas

Se avecina la apertura de otro mercado invernal y todo indica que el Celta, por tercera temporada consecutiva, venderá a uno de sus jugadores titulares. Maxi Gómez puede seguir los pasos dados por Augusto Ferández y Fabián Orellana, tres salidas con tres historias radicalmente distintas.

 
En la segunda temporada de Eduardo Berizzo al frente del banquillo celeste Augusto Fernández forzó su salida con destino al Atlético de Madrid. El cuadro colchonero había perdido a Tiago por lesión y Simeone se fijó en el internacional argentino del Celta para suplir la baja del portugués.
Las negociaciones fueron duras, el empeño del jugador fue clave para que la directiva celeste acabase cediendo y aceptase la oferta del Atlético de Madrid. Augusto pasó de héroe a villano ya que la afición no entendió las formas en las que el internacional argentino forzó su salida de Vigo dejando sólo 4 millones de euros en caja.
El pasado invierno fue el Celta, con su directiva y dirección deportiva a la cabeza, el que decidió prescindir de una de sus piezas más codiciadas. La salida de Fabián Orellana causó un gran revuelo en el club debido a un acto de indisciplina que Eduardo Berizzo calificó de "muy grave".
El Celta no pudo hacer caja con el chileno, su precio se devaluó al ser apartado del equipo y finalmente el Valencia aceptó una cesión con opción de compra a final de temporada. El club ingresó unos 3 millones de euros por el jugador.
Sin la confirmación oficial, este será el tercer mercado invernal en el que el Celta venderá a uno de sus jugadores titulares. La situación es completamente distinta, en este caso es el club el que quiere que Maxi Gómez salga traspasado ante la exorbitante oferta del Beinjing Guoan. 
El club recibirá 25 millones de euros, 20 de ellos fijos, en una operación redonda en lo económico y que supondrá la mayor venta de la historia del Celta en sus 94 años de vida. Tres mercados, tres salidas, tres situaciones radicalmente distintas.