El Zaragoza muestra su mejor versión para subir al podio

Gran victoria del Real Zaragoza para llevarse su tercer triunfo consecutivo. Los de Carreras tuvieron que remontar el tanto inicial del Alcorcón, pero siempre demostraron su jerarquía para sumar los tres puntos. Buen juego y muchas ocasiones para acceder a la tercera posición.

 
El partido tuvo mucho más ritmo del esperado. Desde los primeros minutos, los dos equipos se mostraron con ganas de tener la pelota y de jugarla, algo poco común en la categoría. Fue el Alcorcón en la primera llegada el que pegó el primer golpe con un gol de Rubén Páez. La acción se inicia permitiendo un centro desde la banda derecha, continua con una mala marca hacia el central rival y acaba con una mala intervención de Manu Herrera que, al igual que en el gol del Valladolid, pudo hacer más.
El tanto en contra espoleó al Real Zaragoza. El equipo aragonés puso el turbo y se lanzó a enmendar el fallo. Erik Morán disparó completamente solo desde dentro del área y Dimitrovic sacó su remate. Las llegadas locales eran constantes, el dominio permanente y la sensación de peligro palpable. En una falta sobre Isaac Carcelén, muy presente en el ataque de su equipo, Lanzarote sacó el guante, Diego Rico, un espectáculo cada partido que pasa, puso el balón para Dorca y el remate de éste fue rechazado hasta que llegó a la cabeza de Javi Ros para poner el empate.
La máquina zaragocista carburaba gracias al funcionamiento colectivo y a las nuevas y buenas noticias que iba deparando el partido. Erik Morán es fundamental a la hora de interpretar el guión que plantea Carreras, Dongou fue clave en la presión, aguantando el balón y participando en la circulación jugando de espaldas. A la fiesta se sumó un Hinestroza que estaba con la chispa y todos sumaban. El colombiano, en una galopada de las suyas, envió un trallazo a la madera. Era la antesala del golazo de Dongou.
Diez minutos después de empatar, el camerunés hizo un tanto para enmarcar. Diego Rico puso un centro medido desde la banda, el ariete africano la controló con el pecho en la frontal y, sin dejarla botar, le pegó con el alma para hacer su segundo gol con la camiseta del Real Zaragoza y que servía para irse con ventaja al marcador.
Se jugaron 46 minutos de la primera parte y se vio un partido de Primera. El Real Zaragoza se enfrentaba a un rival valiente y en ese duelo a ‘cara de perro’ los locales sacaron su mejor versión. Quedaba refrendar todo en el segundo acto.
Lluis Carreras se vio obligado a modificar su equipo por lesiones. Jesús Vallejo ni siquiera salió de la caseta y tuvo que salir a Abraham para desplazar a Diego Rico al centro de la zaga. Diez minutos más tarde, Hinestroza, que jugó todo el primer tiempo con un problema en su rodilla derecha, se tiró sobre el césped y Juan Culio salió a ocupar su lugar en el flanco izquierdo.
Mientras tanto, Jean Marie Dongou, que hizo mucho daño a los centrales del Alcorcón, tuvo el tercer gol, pero su disparo se fue demasiado cruzado. A parti de esta ocasión, el partido entro en una fase favorable para el conjunto madrileño. El acoso acabó en una buena acción que desbarató Manu Herrera.
El partido también se puso más de cara para el Real Zaragoza con la expulsión de Chema, que vio la segunda amarilla a falta de 25 minutos para el final. Con uno más, el Zaragoza se dedicó a defender el resultado. En una contra, Lanzarote gozó de una gran ocasión, pero su disparo se marchó fuera por poco.
Con  el Alcorcón ya volcado en busca de la heróica, una  contra muy bien llevada por la banda derecha, Dongou  puso el gol de la tranquilidad haciendo justicia a lo que se veía en el campo y que avalaba su llegada al Real Zaragoza después de haber despertado varias críticas por su escasa aportación hasta el día de hoy. La Romareda acabó siendo una fiesta.