Cani y el camino del ascenso

El Real Zaragoza presentará hoy a Rubén Gracia 'Cani', que llega con el objetivo bien claro: devolver al equipo aragonés a la Primera División. Un camino que conoce bien el jugador zaragozano, pues en las dos temporadas en las que disputó la Segunda División -con Real Zaragoza y Villareal-, logró el ascenso.

Cani tuvo un debut agridulce con el Real Zaragoza. El 11 de mayo de 2002, La Romareda recibía a la que era por entonces una de las grandes esperanzas de la cantera del equipo aragonés. El centrocampista zaragozano debutaba en Primera División con el club que marcaría su vida deportiva. Apenas treinta minutos fueron los que le dio Marcos Alonso aquel día, suficientes para dar buena muestra de su calidad con un caño a Reiziger que todavía se recuerda por el zaragocismo. Sin embargo, aquel también era el último encuentro de una temporada nefasta, en la que el Real Zaragoza se veía abocado a la Segunda División después de más de veinte años.
No hay crisis sin oportunidad y la temporada en Segunda, con Paco Flores en el banquillo, iba a servir para lanzar definitivamente la carrera de Cani. El antes y después de una carrera cuya catarsis se produciría en aquel mítico partido en el Carlos Tartiere, en el que Cani y Espadas se hicieron un nombre en el Real Zaragoza a costa del Real Oviedo. En apenas doce meses, el equipo blanquillo volvía a Primera y lo hacía con un Cani convertido de promesa en brillante realidad.
Tres temporadas después de aquel ascenso y con una Copa del Rey y una Supercopa en el zurrón, Cani marcharía a uno de los equipos emergentes del fútbol español por aquella época. El Villareal se llevaba al futbolista zaragozano en la que sería la última operación de Alfonso Solans como presidente de club aragonés. Con los castellonenses brilló y hasta quedó a las puertas de una final de Champions, pero también tuvo que sufrir la amargura del descenso a Segunda. En una temporada que se torció irremediablemente hasta acabar en el pozo, un solitario gol de Falcao en la última jornada, mandaba al Villareal a la categoría de plata del fútbol español.
Aquel no era un camino desconocido para Cani. En una temporada que comenzó mal, con Julio Velázquez como entrenador y que se enderezó con la llegada de Marcelino al banquillo, Cani fue pieza fundamental para la vuelta del Villareal a la Primera División. Por segunda vez, el jugador zaragozano lograba ascender en el primer intento.
Y es que esas son las dos únicas temporadas que ha disputado Cani en Segunda División y en ambas, consiguió alcanzar los puestos de honor. Ahora vuelve al Real Zaragoza, tras diez años alejado de la capital del Ebro, con esa misma intención, devolver a los blanquillos a la Primera División.