Entrar en la convocatoria se complica
La enfermería del Real Zaragoza ha quedado prácticamente vacía. Sólo Stefan Cezary Wilk, lesionado de gravedad desde el inicio, y un Dongou pendiente de su rodilla están descartado para la cita ante el Numancia. Zapater se ejercitaba ayer en solitario, pero estará a las órdenes de Raúl Agné. El técnico tendrá que hacer ahora más descartes que nunca.
Tras la entrada de Georgios Samaras la pasada semana por primera vez en la convocatoria, el técnico aragonés ha recuperado en los últimos días a Edu Bedia y José Enrique. El lateral izquierdo del conjunto blanquillo ya estuvo cerca de poder entrar en la lista contra el Nástic y siete días después su presencia para este domingo parece mucho más real.
El de Mequinenza está apostando por incluir a todos hasta el día del encuentro y decidir los descartes unas horas antes del choque. Tras recuperar a varios hombres, Raúl Agné tiene ahora más complicado realizar una convocatoria de la que deben caerse seis futbolistas. Sin Wilk y Dongou, el entrenador zaragocista está obligado a dejar cuatro hombres sin convocar.
Un portero (hasta ahora Álvaro Ratón) y Bagnack están siendo descartes habituales. Pero, además de ellos, otros dos futbolistas deben ser elegidos por Agné antes de la cita contra el Numancia.