Las amarillas dejan de ser un problema

Durante las dos jornadas en las que César Láinez ha dirigido al Real Zaragoza, hasta tres jugadores han visto cartulinas amarillas que acarreaban sanción -Ángel, Cabrera y Lanzarote-. Un quebradero de cabeza para el técnico aragonés, pero que acaba con la amenaza de suspensión de cara al tramo decisivo de la temporada.

Perder jugadores por suspensión nunca es una buena noticia, pero en el caso del equipo aragonés, parece haberse escogido el mejor momento. Frente al Elche CF, fue Ángel el que vio la quinta amarilla en una acción en el último minuto de encuentro con el partido decidido. En el encuentro ante el Real Valladolid, fueron Lanzarote y Cabrera los amonestados. El primero, por obstaculizar el saque de una falta; el segundo, por protestar. Especialmente llamativo el caso del central uruguayo, que había logrado mantenerse con cuatro tarjetas desde el mes de noviembre del pasado año.
En cualquier caso, lo que supone un problema para César Láinez de cara al partido frente a la UD Almería, en el que no podrá contar con Lanzarote y Cabrera, será un alivio de cara a la recta final del campeonato, en la que, por el momento, no hay jugadores en peligro de suspensión. En estos momentos, quizá la mayor amenaza sean las tres tarjetas con las que cuenta José Enrique (aunque ninguna ha sido jugando como central) o la propensión de Marcelo Silva a ser amonestado, sumando ya 12 cartulinas, pese a haber logrado frenar la sangría que sufrió entre la jornada 28 y la 30 en la que vio cuatro tarjetas -Numancia, Córdoba y Sevilla Atlético (2)-.