El peligro de jugar contra el colista

El Real Zaragoza afronta de forma consecutiva sus encuentros ante los dos equipos que en este momento de la competición comparten la última plaza de la clasificación: RCD Mallorca y Mirandés. Una situación que en principio es alentadora, pero que en los últimos tiempos no siempre es positiva para el equipo aragonés.

Durante las últimas temporadas, el hecho de jugar frente al colista, no ha sido siempre garantía de buenos resultados para el Real Zaragoza. De hecho, sin ir más lejos, en la presente temporada el equipo aragonés ha sido incapaz de superar al farolillo rojo en sus dos enfrentamientos. Sucedió meses atrás, en la jornada 6, en el mes de septiembre, cuando el conjunto blanquillo tan solo logró empatar en Tarragona ante el que entonces era último, el Nàstic. Más recientemente, se cayó en campo del UCAM, que durante unas horas fue último cuando en la jornada 22 superó al Real Zaragoza.
Mejor fue el balance en la temporada pasada, en la que tan solo se jugó ante el colista en una ocasión, fue en la jornada 37, en la que se venció al Bilbao Athletic por 2-0. Aunque el partido inolvidable en aquella campaña fue el 6-1 ante la Llagostera, un equipo que ya estaba descendido.
Una situación que parece perseguir al Real Zaragoza durante los últimos años, con más ejemplos, como el Sabadell, en la jornada 25 de la temporada 2014-15 contra el que se empató a cero en la Nova Creu Alta. En la 2013-14, se le ganó al Real Madrid Castilla por 1-2 en la jornada 6, aunque se perdió en la 27 frente al filial blanco, que por entonces también compartía la última posición. Esa misma campaña, se caía nuevamente ante el último en la jornada 36, en aquella ocasión era el Girona el que lograba el triunfo por 2-0.
Una racha que el Real Zaragoza tratará de solventar en esta ocasión frente al RCD Mallorca primero, en el estadio municipal de La Romareda, y ante el Mirandés después, en tierras burgalesas.