Samaras, Cabrera y José Enrique, al margen

El Real Zaragoza ha vuelto al trabajo después del empate cosechado en la última jornada de LaLiga 1|2|3, en la que rindió visita al Real Oviedo en el Carlos Tartiere. Tras un largo viaje de vuelta, el equipo descansó el domingo y ha pisado nuevamente el césped de la Ciudad Deportiva en la mañana del lunes en una suave sesión.

Un entrenamiento en el que han estado casi todos los jugadores que fueron de la partida ante el equipo carbayón, con apenas tres ausencias en el grupo. Aunque todos han saltado al campo principal de las instalaciones de la carretera de Valencia para escuchar las palabras de César Láinez al inicio de la sesión, tres han sido los jugadores que se han marchado en cuanto el grupo ha comenzado a trabajar.
Samaras, Cabrera y José Enrique han sido los que se han marchado camino del gimnasio, en el que han realizado trabajo individual. En el caso de los dos últimos, las secuelas del partido frente al Real Oviedo han provocado una sesión de trabajo distinta a la del resto de sus compañeros. En el caso del delantero griego fue un golpe en el partidillo ante el filial el que le impidió viajar a tierras asturianas y sigue provocando su ausencia con el grupo. Habrá que estar pendiente de la evolución de los tres jugadores durante la semana aunque se presume su presencia en el próximo encuentro, ante el Rayo Vallecano.