Lunes atípico en la Ciudad Deportiva

El Real Zaragoza ha vuelto al trabajo después de cosechar su cuarta victoria de la temporada, que tuvo lugar el pasado sábado en el estadio municipal de La Romareda ante el Rayo Vallecano. Contrariamente a lo habitual, el equipo guardó descanso en la jornada inmediatamente posterior al partido para volver a entrenar en este lunes.

Un entrenamiento que ha estado marcado por el fuerte cierzo, que de la misma manera que ha condicionado buena parte de los partidos disputados durante el fin de semana en el fútbol aragonés, también ha estado muy presente en la primera sesión de la semana del Real Zaragoza. La principal consecuencia: el cambio de campo de la primera plantilla, que ha trabajado en el césped sobre el que disputa sus encuentros el Deportivo Aragón.
A nivel puramente deportivo, el equipo se ha ejercitado a dos velocidades. Como es habitual tras los partidos, los jugadores que más minutos acumularon ante el Rayo han trabajado a menor ritmo que el resto. En este sentido, Grippo ha formado parte del grupo de los titulares en detrimento de Verdasca, con Zalaya también presente entre los titulares. Entre los ausentes, Alberto Benito, que apura los plazos para su recuperación y Borja Iglesias, que ha realizado trabajo individualizado.