Un grupo inglés se interesa en comprar el Real Zaragoza

Un grupo inglés con interés en invertir en algún club de fútbol de España ha puesto sus ojos en el Real Zaragoza. Según ha podido saber ElDesmarque, un representante de los inversores británicos ha hecho llegar recientemente este interés a los dirigentes zaragocistas. Concretamente, las primeras conversaciones, que se pueden considerar como informales, se produjeron a principios de este mes. La persona elegida por los posibles compradores ha sido un prestigioso abogado zaragozano con experiencia en el mundillo futbolístico.

 
Se trata de un primer movimiento, que debería venir acompañado de una oferta más en firme y en la que se reflejasen los parámetros de la operación. En cualquier caso, la Fundación Zaragoza 2032 ya ha manifestado su intención de no vender el Real Zaragoza y así se lo han hecho saber sus patronos al intermediario que mandaron los ingleses para que pulsase la idea que llevan Alierta, Yarza, Iribarren y Forcén a este respecto.
El grupo inglés lo conforman varios inversores entre los que habría empresarios con capital procedente de sus negocios en la zona árabe. Se trata de una gestión que se podría haber iniciado en la propia Liga de Fútbol Profesional en el afán que tiene su presidente, Javier Tebas, en buscar inyecciones de capital extranjero para clubes con demostrado potencial y que se ven maniatados por las deudas adquiridas en el pasado cuando no existía el control económico actual.
El Real Zaragoza aparece en el escaparate de los clubes ‘comprables’ como una de las piezas más codiciadas del mercado. El club aragonés ha rebajado su deuda hasta los 83 millones de euros, una cantidad asumible de conseguirse el ascenso a Primera. Además, se valora que sea el equipo de una ciudad grande, logísticamente perfecta y con los servicios necesarios para iniciar cualquier proyecto de envergadura. Los inversores también valoran la fidelidad de su afición y los buenos datos que atesora el club en marketing, merchandising y audiencias televisivas. 
El único hándicap sería el campo de fútbol, pero también entienden que ocurra lo que ocurra en un periodo máximo de cinco años el asunto tendría solución por el estado actual que presenta La Romareda y los riesgos que puede haber para utilizarla.