El equipo de bobsleigh de Jamaica, cuando la realidad supera a la ficción

Casi sin querer, el bobsleigh se ha convertido en una de las grandes atracciones de los Juegos Olímpicos de Invierno. La disciplina acapara gran parte de los focos al tener a un país tropical entre sus participantes. Jamaica, una vez más, estará también en PyeonChang.

Por ponernos en contexto: el bobsleigh es una disciplina olímpica en la que se desciende por equipos con un trineo por una pista tubular helada. Los equipos pueden ser de dos a cuatro personas y una de las principales bazas de cada grupo llega en la salida, ya que los miembros tienen que correr empujando el trineo con el objetivo de alcanzar la máxima velocidad posible para el descenso.
Esa velocidad explosiva ha hecho que Jamaica haya conseguido consolidarse en la disciplina olímpica. El país caribeño lleva participando en los juegos invernales desde el año 1988 en Calgary, y fue entonces cuando se empezó a convertir en una gran atracción tanto para el público como para los medios.
La idea, eso sí, parte de dos empresarios de Estados Unidos, que en un viaje a Jamaica se fijaron en una competición popular que tenía cierto parecido con la discplina olímpica. Fue entonces cuando decidieron poner en marcha un equipo de bobsleigh recurriendo al ejército, donde buscaban personas con buen estado físico.
Los frutos llegaron en 1988, cuando consiguieron billete para los Juegos de Calgary, en Canadá. A pesar de que tuvieron un accidente en su primera carrera, consiguieron acabar la prueba andando y se convirtieron en una gran atracción para el público. Sus resultados mejoraron posteriormente, aunque no han conseguido lograr ninguna medalla olímpica.
Este año, Jamaica ha dado un paso más y por primera vez en su historia tendrá también un equipo femenino de bobsleigh en PyeonChang justo cuando se cumplen 30 años del debut del equipo masculino. Una historia que no solo caló en el deporte, sino que también fue reflejada en el cine y que inspiró la película 'Cool Runnings'. La realidad del deporte, a veces, es capaz de superar a la ficción.