Elogios y más elogios como norma
Los medios de comunicación siguen deshaciéndose en elogios cuando les toca hablar del Málaga y no es para menos. Ya se está convirtiendo en la tónica habitual tras los partidos del equipo de Gracia.
Diario SUR titula "El Málaga es un avión": "El Málaga es un avión. Capaz de destrozar a un equipo abierto y hábil para fulminar a uno cerrado. Esta noche se zampó a la Real en un partido menos vistoso en el que tuvo que sobreponerse a las lesiones musculares de dos defensas en apenas diez minutos. Y lo hizo con su sello: un contragolpe fulminante culminado por Juanmi".
La Opinión de Málaga destaca "Póker en Anoeta": "La imagen de Nordin Amrabat con las manos sobre sus muslos, inclinado por el agotamiento pero esbozando una sonrisilla picarona denotaba ayer que el partido en San Sebastián había ido bien, que había ido muy bien. El delantero malaguista refleja con esa imagen sin palabras la felicidad del trabajo bien hecho, el cansancio de haberse vaciado en 90 minutos de puro vértigo para conseguir la cuarta victoria consecutiva, para seguir en la pomada de la lucha europea y, sobre todo, para alejarse a 13 puntos de la zona de descenso".
En Málaga Hoy el titular es brillante "Son obreros, son magos": "Javi Gracia y sus jugadores se mirarán las manos y encontrarán hollín y oro a partes iguales. Porque para encontrarlo hay que pasar mucho tiempo picando en la mina. En eso ha convertido el navarro a este equipo. Una sociedad con la solidaridad de una ONG y la voracidad de tiburones de oficina. El aficionado puede disfrutar de la entrega y el compromiso y de sus chispazos arriba, hay para elegir. Cómo ganó el control de las emociones a la Real en todo momento, cómo dio el zarpazo del triunfo en un tramo final espectacular. Ahí emergió Amrabat, con sus dos tanques de gasolina, con sus carreras imparables, con su ojo en la nuca. Abonado al carril derecho, donde se vuelve superlativo. Esa zona tenía dueño, era la calle Joaquín. Pero el duende del gaditano le ha hecho hueco al tiranosaurio que lleva dentro el holandés. Cuatro victorias seguidas, con el hocico asomado a Europa y Javi Gracia metiendo el culo donde se sentaba intocable Pellegrini con sus números históricos".
