Tissone, la sonrisa entre las penas

Fernando Tissone volvió a sentir el cosquilleo en la previa de un partido. Había pasado más de un año desde la última vez, el 15 de marzo de 2014 ante el Real Madrid en La Rosaleda. Después vino su lesión de ligamento cruzado y una larga recuperación que hoy ha terminado de arrinconar en un cajón. Esta noche en Ipurua volvió a ser titular en un partido oficial.

Tissone solo había jugado dos ratos esta temporada. 12 minutos en Liga y 26 en Copa del Rey en dos encuentros, más algunos bolos. Hoy las balas eran de verdad y, a pesar de no ser un buen día para reaparecer por el pobre nivel del equipo, el argentino cumplió su misión en el centro del campo. Gracia quiso apuntalar la zona ancha y quedó satisfecho con la labor del Tisso.
No obstante, Tissone cometió algunos errores, como la enganchada que rompía el fuera de juego en el gol mal anulado a Arruabarrena en la primera parte y alguno de entrega de balón, pero en líneas generales estuvo valiente, con determinación en la creación, intenso como siempre atrás y asomándose en alguna ocasión para probar fortuna con el golpeo.
Tras el encuentro, Tissone habló para los medios: "Después de estar más de un año sin jugar 90 minutos me he visto muy bien. La verdad es que las cosas me han salido mejor de lo que esperaba. Tenemos que mirar hacia arriba. Si miramos hacia abajo, no ganaremos más. Tenemos que ser optimistas".
Ya sobre el partido, manifestó: “Sabíamos que sería un partido complicado, porque ellos se iban a dejar la vida, como nosotros. El partido ha sido igualado, pero un episodio cambió el resultado. Hemos corrido mucho, dejamos la vida en cada balón y nos vamos con cero puntos y con un amargor”.
“Todos los partidos son complicados, estamos en la mejor liga del mundo y, si no damos el 200 por cien, no vamos a ganar. Ahora vamos a partidos de liga alta y contra estos equipos damos la mejor cara y jugamos mejor, esperemos que sea este sábado”, finalizó Tissone, el rayo de sol en la tormenta vasca.