El Barcelona como escaparate

La lupa del fútbol mundial enfocará a La Rosaleda durante la tarde noche del próximo sábado (20:45 horas). Llega el líder de LaLiga Santander a Martiricos, el FC Barcelona. Se enfrentan David y Goliat, el último y el primero, y todo el planeta fútbol fijará sus ojos en el partido. Sirva un dato para corroborarlo, por primera vez desde que se instauró el nuevo modelo televisivo, un partido del Málaga será el ‘Movistar Partidazo’ de la jornada.

El encuentro, más allá de ser la enésima oportunidad para que el Málaga se reenganche al milagro de la salvación, supondrá un interesante escaparate para los futbolistas a título individual y para el propio club en vistas a un posible escenario en Segunda División, en el que tendría que soltar lastre. Por todos es sabido que un partido ante el Barcelona tiene ecos mundiales, por lo que una buena actuación le puede suponer a un jugador un buen contrato (que le pregunten a Juanmi). Pero esto no es nuevo, muchos jugadores suelen dar su mejor versión en grandes escenarios o ante grandes rivales. Es puro fútbol. Otra cosa es la opinión que suscite entre el aficionado, pero los pequeños suelen crecerse ante los mayores en búsqueda de un lucimiento que también va unido a la motivación de una cita de tal calado.
No hay que obviar tampoco que muchos jugadores de la actual plantilla están pendientes de ir al Mundial. ¿Se imaginan un gol de En-Nesyri al Barça, equipo estrella en Marruecos? Pues esa situación puede extrapolarse a otros internacionales blanquiazules como Rolan o Ricca, y también a cedidos con destino incierto para la próxima temporada. Sea para lo que fuere, el duelo del sábado ante el Barcelona será un escaparate para todos, pero por encima de ello debe estar la imagen de la institución y del club, ya bastante deteriorada a nivel deportivo esta temporada.