Las lágrimas de Keidi Bare y el rotundo apoyo del vestuario

La única nota negativa del Málaga-Oviedo de este lunes la protagonizó Keidi Bare, expulsado a la media hora por una entrada muy dura sobre Ibra. Que la acción es involuntaria parece evidente, pero no es menos cierto que un jugador no puede ir así a un duelo aéreo, con la pierna tan levantada y con los tacos por delante. Se dio cuenta el albano al instante del daño que hacía a su equipo dejándolo más de una hora en inferioridad numérica, aunque el Málaga supo sobreponerse y ganó bien.

En el vestuario arroparon a Keidi Bare en el descanso. Estaba abatido. Se retiró del terreno de juego llorando, como se aprecia en el vídeo superior y en la imagen inferior. Fue consolado por Víctor Sánchez del Amo justo antes de enfilar el túnel de vestuarios, pero el futbolista estaba desolado, consciente del error que había cometido. También trataron de animarlo en la caseta sus compañeros. De hecho, una de las motivaciones para conseguir el triunfo en la segunda parte era ese, darle una alegría a un Keidi hundido.

Así lo contó Víctor Sánchez del Amo en rueda de prensa: "Imaginad el disgusto que se ha llevado... Conocemos a Keidi Bare, ha sido totalmente fortuito. Se ha dado cuenta del daño que le hacía al equipo, sus compañeros le han defendido, lo hemos hablado en el descanso. Era una de las motivaciones que teníamos que tener para ganar. Lo que hemos hecho ha sido animarle. Todo suma. Ya estaba fuera del partido y podía seguir sumando animando al equipo".