A falta de dos piezas para completar el puzzle
El Unicaja, tras anunciar en el día de ayer al base Josh Adams, ya tiene cuatro caras nuevas para afrontar la temporada 2019/2020. Y aún restan dos incorporaciones más, dos piezas para completar el puzzle con el que trabajará Luis Casimiro de partida para afrontar el curso, una en la línea exterior y otra en la pintura.
Para el puesto de escolta, el nombre que actualmente está sobre la mesa es Francis Alonso. Las negociaciones con el jugador malagueño están consumadas para que firme con el Unicaja para las próximas tres temporadas y puede hacerse oficial su llegada en los próximos días. La duda radica en cuál es la situación más beneficiosa para ambas partes en la próxima campaña.
Existe la opción de que se quede en el cuadro cajista donde, de partida, no serían excesivos los minutos y protagonismo del jugador, pero compartiría posición con un escolta como Jaime Fernández, que puede aportarle mucho en su crecimiento, estando también avalado por la afición, que le considera de la casa, uno de los suyos.
También se baraja la opción de la cesión a un equipo de la Liga Endesa donde Alonso pueda disfrutar de más minutos y de tener en sus manos bolas calientes e importantes. Ante esta disyuntiva, desde el club no se deja de visualizar el mercado por si surge una opción que ayude a tomar la decisión definitiva en el puesto de escolta.
En la pintura, el Unicaja cuenta ya con cuatro hombres, el capitán Carlos Suárez, Rubén Guerrero y los recientemente fichados Deon Thompson y Volodymyr Gerun. Con la opción del americano de actuar tanto de ‘4’ como de ‘5’, las diferentes posibilidades para completar el puesto de pívot se amplían. Aunque desde la dirección técnica se prefiere un ala-pívot para la plantilla, no se descarta que termine llegando un hombre grande. El mercado mandará, estudiando ver qué jugador puede recalar en el equipo malagueño para cumplimentar una pintura de garantías.
