Unidos por La Palmilla: Apoño, amigo y mentor de Antoñín

Un palmillero hace las delicias de La Rosaleda. Antonio Cortés Heredia ha derribado la puerta. La ha echado abajo a base de trabajo, pero también gracias a sus condiciones y su talento, aire fresco para un Málaga CF que está empezando a enderezar el rumbo. Antoñín fue el héroe absoluto del triunfo ante el Oviedo. Marcó el primer gol, provocó el penalti del segundo, y se retiró ovacionado por una afición rendida a sus pies. La Palmilla vuelve a estar muy presente en el Málaga con él y su 'hermano' Luis Muñoz. Los conoce bien Antonio Galdeano Benítez 'Apoño'. El que fuera malaguista lleva viendo a Antoñín por las calles del barrio desde que echó los dientes. Le guía, le ayuda y ahora se alegra de todo lo que le está pasando.

"Lo conozco desde pequeño, desde que era un niño, cuando tenía ocho o nueve años. Ahí todavía ni jugaba prácticamente, pero lo conocía por su familia, de aquí de La Palmilla. Luego empezó a jugar en el 26 de Febrero y su nombre comenzó a sonar en el barrio en edad cadete, fue cuanto despuntó bastante. Hizo un año espectacular y es cuando se le empezaron a ver unas condiciones muy diferentes a las que tenían los niños de esas edad en esos momentos", explica Apoño a ElDesmarque Málaga. 

Una cesión clave con el sello de Apoño

Antoñín, tras un fugaz paso por la cantera del Schalke 04, volvió a La Palmilla. Quería volver a ser feliz, y el fútbol se lo permitió. Poco después, el Málaga, que ya había peleado antes con el club alemán y varios más para reclutarlo, se llevó el gato al agua. Empezó bien, marcándole un doblete a su querido 26 de Febrero, pero perdió foco y la segunda vuelta del curso 2017/18 jugó a préstamo en El Palo. Una fructífera cesión que le ayudó a crecer y que fue gestionada por Apoño, su gran valedor para que recalara en el cuadro marinero. Allí, ídolo y discípulo, compartieron vestuario durante unos meses.

"En aquel momento en el Málaga juvenil no estaba teniendo muchos minutos por alguna circunstancia. Yo hablé con el entrenador y los responsables de El Palo, les dije que lo firmasen porque nos iba a venir muy bien en Tercera. Era un chaval muy eléctrico, con muchas ganas e ilusión. Nos podía aportar muchas cosas y Funes al yo decírselo ni se lo pensó. Yo jugaba en ese equipo y le ayudé, y la verdad es que hizo una segunda vuelta bastante buena", cuenta.

El que fuera mediocentro del Málaga, ahora entrenador en las categorías inferiores del 26 de Febrero, es amigo, espejo, ejemplo y mentor para un Antoñín que cual esponja absorbe sus consejos: "Me llevo muy bien con él, es un niño al que veo a diario en el barrio. Llegar a Primera desde un barrio humilde como el nuestro cuesta incluso más que en otras zonas. Ahora están él y Luis Muñoz, me llevo muy bien con ellos. Él tiene que pensar que está haciendo bien las cosas, pero en el fútbol hoy eres muy bueno y mañana muy malo. En este mundo, hoy metes tres goles y eres Dios y si fallas cuatro se dice que 'a este jugador nos lo han cambiado'. Tiene que tener los pies en la tierra y seguir trabajando, eso no se negocia. Si trabajas siempre tienes opciones de jugar, y él lo está haciendo. Esperemos que le dure mucho este momento, que sea el comienzo de una carrera larga".

Sobre el Málaga y Manolo Gaspar

"Tiene chispa, tiene algo diferente. Como futbolista, en este Málaga en el que hacía falta un cambio radical, veo que le da luz al equipo", dice Apoño de un Antoñín que está siendo clave en la recuperación del conjunto blanquiazul: "El equipo ha ganado bastante en la zona defensiva, está compitiendo bastante bien. Con esa actitud, para la salvación tiene que dar sobrado. A ver si es capaz de enganchar un par de victorias más seguidas y se coloca lo más arriba posible. Y que se enfoque todo un poquito mejor, todos los aspectos del club. Hay que intentar afianzar al Málaga en los puestos de arriba, y si Dios quiere conseguir el ascenso".

También conoce bien Apoño a Manolo Gaspar, con el que jugó en el Málaga. El de La Palmilla cree que el club acierta apostando por el paleño como director deportivo: "Manolo es una persona capacitada, lleva años trabajando mucho en el club de 'tapado', viajando, viendo fútbol... Es una persona a la que deben dejar trabajar y decidir, que salga su trabajo a relucir. Seguro que hará bien las cosas".