El gran reto de convencer
Casi 60 después todo vuelve a una aparente normalidad. Muy aparente, mejor dicho. Entrenamientos con mascarillas, guantes de látex, varios metros de separación... Todo es extraño, aunque haya un balón de por medio. 30 futbolistas -sólo 18 de ellos con ficha profesional- volvieron este fin de semana a La Rosaleda como el chiquillo que regresa al colegio con muchas historias que contar. A diferencia de lo que ocurre en la niñez, a los jugadores del Málaga les toca echar el resto para una pretemporada a destiempo y los 11 partidos que restan por delante. 11 finales que se jugarán con poco margen para el descanso y en el que los menos habituales hasta el parón obligado tendrán la oportunidad de ganarse a Pellicer, que volverá a ejercer de equilibrista para formalizar convocatorias y alineaciones.
Aún más si termina por confirmarse una medida muy significativa, y es que la Comisión Delegada aprobó por unanimidad la propuesta de la RFEF para que los equipos puedan realizar hasta cinco cambios en los partidos que restan para el final del campeonato y que las convocatorias sean de 23 efectivos. Mucho que rotar salvaguardando la norma de los siete profesionales por obligación sobre el terreno de juego, ya que de momento no asoma en el horizonte la opción de que se modifique. Así, hay varios nombres que aparecen con fuerza en la lista de cuentas pendientes. Ya sea por deméritos propios o por simples cuestiones tácticas del entrenador, pero Pellicer necesita que la competencia aumente.
Nueve partidos dirigió el castellonense, dejando claras sus ideas. Por este orden, los 11 jugadores con más minutos en esos encuentros fueron: Munir (810), Luis Hernández (810), Sadiku (800), Luis Muñoz (771), Juankar (756), Juanpi (737), Adrián (516), Pacheco (428), Hicham (415), Ismael (406) y Cifu (404). A partir de ahí, los registros comienzan a aminorar. Algunos de forma obligada, casos de Tete por su poco tiempo en Málaga o de Adrián y Keidi por sus lesiones. Destacan los escasos 35 minutos de Buenacasa con Pellicer. El delantero, que sigue manteniendo la misma ilusión de cuando llegó, está ante un reto importante en una recta final en la que se necesita músculo de todos.
El asterisco de la cantera
En esa obligación de buscar piernas frescas aparecen otros nombres con poco espacio en los planes de Pellicer. Boulahroud (56 minutos), Benkhemassa (78) o un Renato (159) al que la llegada de Tete y la confianza en Juanpi le apartó de los planes protagonistas. Sin minutos asoman Mikel Villanueva y Rolón, estando por ver sus respectivas evoluciones en los 11 partidos restantes. También Aarón Ñíguez, al que el parón le impidió debutar con la blanquiazul. Apunta a jugador vital. Mención aparte merecen los canteranos que vienen apretando y que pueden tener su cuota de protagonismo en función de los acontecimientos. Juande o Julio ya han tenido apariciones con Pellicer y Ramón, Iván Jaime o la gran sorpresa de la lista, Quintana, también quieren descollar.