Objetivo cumplido: el Málaga está salvado matemáticamente

Por fin. Ha costado, vaya que si ha costado, pero el Málaga CF ha logrado la permanencia matemática en LaLiga SmartBank a falta de una jornada para su conclusión. Fue ante el Alcorcón, con una victoria gracias a dos golazos de Juanpi y Tete Morente, cuando se pudo dar carpetazo a una temporada que nadie querrá recordar en un futuro, ni cercano ni lejano, porque lo cierto es que las buenas noticias se pueden contar, si acaso, con los dedos de una mano. Institucional y deportivamente el curso ha sido para olvidar, pero al menos se ha cerrado manteniendo una plaza en el fútbol profesional. Botín escaso, no cabe duda, pero absolutamente necesario para salvaguardar la vida de la entidad. Hubo que estar pendiente de otros campos, los goles de rivales directos fueron llegando y hasta el Lugo sacó la cabeza -junto al Albacete- a última hora. La pelea en la última jornada será para otros.

Atrás -muy atrás- queda el verano pasado, que terminó con un lío morrocotudo (salida de Okazaki, jugadores sin ficha...) en los despachos que avanzó lo que estaba por venir. Permanecieron Víctor y una plantilla cogida por alfileres que siempre navegó en el filo de la navaja. El Málaga convivió durante no pocas fechas en puestos de descenso a Segunda B, y encima mirando hacia lo que Al-Thani, Shaheen y el resto de innombrables quisieron manejar. Echaron a Víctor (con otro lío de por medio), echaron también a Al-Thani y a su secuaz Shaheen y llegaron Pellicer y el administrador judicial. Un soplo de aire o, al menos, de tranquilidad. Entre demandas y juicios, el equipo estaba obligado a cambiar el paso.

A partir de ahí el Málaga creció y creyó. En todas las parcelas, desde el césped hasta los despachos. El técnico de Nules amasó una plantilla con algún retoque gracias a la labor de Manolo Gaspar -tomó las riendas tras el despido de Caminero- y la dirección deportiva para impedir de cualquier modo el descenso a los infiernos. Y lo ha logrado, con una sobredosis de esfuerzo después del parón por el coronavirus. Lesiones, sanciones, fichas profesionales... todo se quiso poner en contra para el Málaga que, sin embargo, ha sabido sacar los puntos necesarios cuando había que hacerlo para aguantar un puesto en LaLiga SmartBank. El futuro, casi por obligación, sólo puede ir a mejor.